Arnaldur Indridason ganó hoy el VII Premio RBA de Novela Negra con ‘El pasaje de las sombras’.

Es, de largo, uno de los grandes nombres del nordic noir, ese espectáculo de firmas que llegadas desde el norte de Europa calientan las cabezas de millones de lectores. El jurado utilizó a Lorenzo Silva nada menos que para anunciar que tras el pseudónimo de Stephan se presentaba este islandés autor de ‘Los hijos del polvo’ y que se une a la lista de premiados en estos años junto con Francisco González Ledesma, Andrea Camilleri, Philip Kerr, Harlan Coben, Patricia Cornwell y Michael Connelly.

El premio consiste en la publicación en castellano y catalán de la obra, con RBA, además de 125.000 euros de premio en metálico que ayudarán a que este superventas en toda Europa siga dedicándose por entero a la literatura, para crear novelas como este ‘El pasaje de las sombras’ que transcurre en dos planos temporales, uno en plena ocupación de Islandia por los Aliados durante la Segunda Guerra Mundial y otro en la actualidad que dibuja la actual isla.

El autor explicó que el personaje es un detective retirado que puede observar ambos planos históricos en perspectiva. Para él aquellos años 40 donde la isla servía de puente de conexión aérea entre EEUU y Reino Unido fue una época fértil en relaciones y en apertura, cuando Islandia lentamente salió de su marasmo para convertirse en una nación más moderna, algo que influyó sobre todo en los jóvenes. La novela es fiel al estilo de este escritor, actualmente una de las caras culturales de su país junto con Björk, por ejemplo: el realismo social y el detallado perfil psicológico de sus personajes.

La historia se centra en el caso de una joven que aparece estrangulada detrás del Teatro Real, que se estaba construyendo entonces y que era el centro de aprovisionamiento militar, enmarcado en una sociedad que creía en los elfos y en la magia. En el plano actual, dos agentes de policía acuden a un inmueble de la capital islandesa alertados por una inquilina que no había visto a su vecino con vida desde hace demasiado; éste yacía muerto en su cama.

Arnaldur Indridason