Cincuenta años atrás un grupo británico consiguió su primer número uno, nada raro, si no se tratar de The Kinks y del electrizante ‘You really got me’. 

Fue el 10 de septiembre de 1964 y su canción superaba con creces el pop beatlemaníaco para darle más brío y enganchar quizás con los arranques de los Rolling Stones. Era el sonajero preferido de la época, el ‘You really got me’ que lanzó a The Kinks. El próximo 3 de noviembre se publicará una caja recopilatoria de 5 discos a través de BMG en asociación con Sony. Esta edición esencial incluye muchos clásicos como ‘Stop Your Sobbing’, ‘All Day And All of the Night’, ‘Till The End of The Day’, ‘A Well Respected Man’, ‘Sunny Afternoon’, ‘Dead End Street’, ‘Waterloo Sunset’, ‘David Watts’, ‘Autumn Almanac’, ‘Days’, ‘Picture Book’ y ‘The Village Green Preservation Society’.

The Anthology 1964-1971′ está compuesta por 5 CDs con más de 100 canciones, la colección más completa que se haya editado de la banda con todas las canciones esenciales durante los años 60 y principios de los 70 bajo la discográfica Pye. Buena parte del material ha sido remasterizado y el box incluye maquetas, entrevistas, mezclas alternativas, tomas falsas extraídas de sesiones de grabación, 25 temas que habían quedado en el cajón de los recuerdos y no disponibles hasta ahora, un single exclusivo y decenas de notas de la grabación.

The Kinks nacieron en el norte de Londres, creación conjunta de Ray y Dave Davies en 1964, el mismo año en el que lograron poner en órbita su primer gran éxito, ‘You really got me’, primera piedra de una de las carreras mas meteóricas de la música. Fueron parte de la invasión mundial de la música británica y sobre todo los pioneros del rock, separados de los Beatles y más cercanos quizás a los Rolling Stones, pero con un sello propio. Su influencia ha sido tanto o más grande que los dos tótems mencionados de la música.

Su estilo era una mezcla extraña de rock, blues, country e incluso la música teatral inglesa que causaba furor en aquellos años entre parte de la clase media británica. El grupo tuvo una vida larga: 32 años, siempre alrededor de Ray (cantante y guitarrista) y su hermano Dave (ídem). A su alrededor pulularon Peter Quaife, Mick Avory, John Dalton, Bob Hernit, Jim Rodford, Nicky Hopkins, John Gosling e Ian Gibbons desde los 60 hasta el final en los 80.

Su éxito cristalizó entre los 60 y los 70, con álbumes de gran éxito de crítica y público, pero sin perder nunca el estilo inglés de sus trabajos, como es detestable en ‘Face to Face’, ‘Something Else’, ‘The Kinks Are the Village Green Preservation Society’, ‘Arthur’, ‘Lola Versus Powerman and the Moneygoround’ y ‘Muswell Hillbillies’. Pasaron por una mala época a mediados de los 70, cuando su rock conceptual se les fue de las manos y terminaron por regresar en los 80 gracias a que las bandas “hijas” de su estilo (Van Halen, The Jam, The Pretenders) les recuperaron con versiones modernas de sus éxitos. Luego serían Oasis y Blur los que prosiguieran con el tributo, dejando claro que dos generaciones enteras no tenían problemas en verles como sus ancestros e influencias. Los miembros originales del grupo ingresaron en el Salón de la Fama del Rock en 1990.