Es oficial: Amazon va a por todas y ha comprado los derechos de ‘El Señor de los Anillos’ para convertirlo en una serie de TV para su servicio de streaming. Un salto adelante en contenidos, gasto y ambición. The Hollywood Reporter ha dado a conocer nuevos detalles sobre este acuerdo histórico: Amazon Studio adquirió los derechos de la serie por 250 millones de dólares, levantándole a Netflix el proyecto, y la inversión será de casi 1.000 millones de dólares en cinco temporadas.

Con semejante presupuesto supera, con creces, el grado de inversión de la otra macro serie actual, ‘Juego de Tronos’. Según The Hollywood Reporter, el guión será una precuela de los acontecimientos previos a ‘La Comunidad del Anillo’, primera entrega de la trilogía original, lo que la colocaría en el mismo plano argumental que ‘The Hobbit’, que ocurre años antes. El plan de Amazon es de cinco temporadas a diez capítulos cada una, con 60 minutos reales de metraje. Si funciona hay planes para expandir aún más el universo de Tolkien, pero primero debe ser rentable.

No se trata de un remake o reboot, sino de una derivación de una de las historias paralelas esbozadas por Tolkien en sus libros de cuentos. Esto apuntaría al último premio de caza mayor salido de la mente del escritor, ‘El Silmarillion’, el gran libro resumen de toda la mitología creada por el autor y que lleva años como posible carne de adaptación por Peter Jackson, que sin embargo ha evitado comprometerse. Se estima, eso sí, que Jackson se involucre en esta conversión en serie de TV. Si Amazon finalmente compra los derechos de este último libro inacabado, podría ser Jackson el encargado, ya con el paraguas de la multinacional, de adaptarlo.

La serie, que contará con cinco temporadas, podría continuar a través de una historia derivada. Según cuenta el medio especializado, todo dependerá del éxito de la misma. De hecho, varias son las personas que apuntan a que Amazon estaría tras los derechos de ‘El Silmarillion’, una de las novelas de J. R. R. Tolkien. La explotación de estos derechos es un negocio multimillonario que ya lleva seis películas y millones de dólares de beneficio. Tantos que realmente es un regalo muy apetecible para las productoras. Y este proyecto es un éxito negociador que comunicó el propio jefe supremo del conglomerado, Jeff Bezos.

El proyecto requerirá de más socios: Amazon Studios se unirá a New Line Cinema, división de Warner Bros y propietaria de los derechos cinematográficos de las dos trilogías desarrolladas por Peter Jackson a partir de las obras de Tolkien, la editorial dueña de los derechos editoriales, HarperCollins, y los herederos de Tolkien, famosos por defender con uñas y dientes el universo de su creador. La compañía también acometerá el mismo patrón de explotación comercial del resto de las majors: por supuesto el resultado sólo estará disponible en exclusiva en Amazon Prime Video, pero ya para 2020. Y es una jugada maestra para Amazon, porque le toma la delantera a HBO y Netflix en la carrera que tienen todas (incluyendo el futuro servicio de streaming de Disney).

Las tres (más la compañía del ratón) empezaron una carrera a fuego y cheque en la que cada una ha usado sus ventajas: HBO es la más veterana y tiene de su lado su nivel de calidad en la ficción, y una larga nómina de colaboradores; Amazon tiene el poder de Silicon Valley y la chequera de Jeff Bezos; Netflix es la pionera de la descarga bajo pedido y ha torpedeado con éxito a Hollywood; y Disney tiene un poco de todo (poder, dinero, influencia, los derechos de Marvel y Lucasfilm, Pixar…). Pero Amazon ha dado un gran salto adelante después de éxito del estilo HBO como la multipremiada ‘Transparent’. La era de las majors digitales ya están aquí.