Enrique González Macho revalida mandato y derrota en las elecciones a Piluca Baquero. El actor Antonio Resines y la directora Judith Colell serán sus vicepresidentes.

El distribuidor, exhibidor y productor Enrique González Macho ha sido reelegido este sábado presidente de la Academia de Cine en el transcurso de la Asamblea General que se ha celebrado en la sede de la institución. En el que será su segundo mandato al frente de la Academia, el fundador de Alta Films y propietario de los cines Renoir está respaldado por el actor Antonio Resines y la directora y guionista Judith Colell, que ocuparán los cargos de vicepresidentes primero y segundo, respectivamente. El recuento de votos se ha cerrado con 290 votos para Enrique González Macho y 110 para Piluca Baquero. En blanco, 22 votos y 1 nulo. El recuento total de votos ha sido de 423.

Enrique González Macho, en un reciente acto con su rival en las urnas, realizó una declaración de amor “al cine español y a la Academia, cuyos miembros son absolutamente iguales, con los mismos derechos y obligaciones, y esto lo hemos llevado siempre de manera seria y rigurosa, sin agravios comparativos en los tres años que he permanecido en el cargo, tiempo en el que reconozco haber sido muy feliz”. Tras agradecer la labor de Marta Etura en el anterior mandato, “que no ha sido fácil ni en el orden político ni en el económico, pero hemos procurado que afectara lo mínimo a la imagen de la Academia, cuyo estatus es el de un ente respetable y respetado”, dio la bienvenida a su terna a Antonio Resines y esbozó las líneas de su programa “continuista”.

Antonio Resines, González Macho y Judith Colell

González Macho se pronunció sobre las cuentas de la entidad, “que se han mejorado”; el apoyo de patrocinadores, “que no ha sido fácil, pero en estos momentos no hay nada que ponga en peligro la existencia y actividad de la Academia”, su apertura a todo el sector “porque no somos un gueto”, y la carencia de una Ley de Cine, “el principal problema del que se derivan gran parte de los demás”.

También se enorgulleció de haber estado “en todos los foros en los que hemos sido invitados. En ellos, siempre hemos intentado presentar propuestas razonadas que han sido muy valoradas. Es muy importante que la entidad colabore y esté presente, otra cosa es que nos hagan caso…”. Destacó que la Academia no era un órgano ejecutivo, “por ello, hacemos lo que podemos”.

El veterano profesional no se olvidó del IVA cultural, de las televisiones, de la piratería, ni de las nuevas tecnologías. “En esto soy muy batallador y, aunque son esenciales, no son todavía suficientes para que se mantenga nuestra actividad. Mis palabras no son en contra, pero reitero que aún no tienen el peso suficiente para que nuestra actividad industrial se mantenga solo con ellas”.

En cuanto al cine low cost, apostilló que “el cooperativismo ha existido toda la vida. Hay películas que se hacen con muchas dificultades y hay que apoyarlas. Me alegra mucho que en los últimos Goya este tipo de producciones tuviesen una gran relevancia. Esto ha sido un avance, no nos miramos al ombligo y refleja una apuesta por todas las formas de expresión”. Respecto a la imagen de nuestra cinematografía, ha manifestado que es un asunto en el que continuará trabajando.

Dispuesto a poner en marcha un Congreso del Cine “siempre y cuando se implique todo el sector y la Academia cuente con los medios necesarios para llevarlo a cabo”, declaró estar “relativamente satisfecho de las últimas tres ediciones de los Premios Goya, ceremonias “que me gustaría cambiar ligeramente, pero siempre dentro de nuestras posibilidades”. Apasionado por la profesión que lleva ejerciendo hace 45 años, agradeció la labor de Emilio A. Pina al frente de la dirección general de la entidad: “Estoy muy orgulloso de lo que ha hecho”, de la Junta directiva y del equipo de la institución. “Queremos hacer más y mejor”, resaltó González Macho.