Finalmente HBO pasa al ataque: la mayor televisión por cable (y de más éxito) le devuelve el golpe al mayor canal por internet de televisión, Netflix. 

Lo hace donde más le duele: HBO ofrecerá sus contenidos por internet para competir con Netflix, con lo que ya no habrá problemas de soporte. Hasta ahora Netflix le había ganado la partida a los canales generalistas (NBC, Fox, ABC, CBS…) y a los más especializados que emiten por cable (HBO, AMC, CW…) porque ofrecía por internet un servicio que incluía series y películas enteras, descargables legalmente a precios razonables y con múltiples posibilidades. Su producto estrella era ‘House of Cards’, multipremiada y con un tirón tremendo. En realidad imitaba a HBO pero en un soporte con el que podía llegar a mucha más gente y más rápido.

En los premios ya le pisaba los talones a HBO, que ha basado su grandeza y éxito en la calidad de las series de televisión, en las películas, documentales y programas como el del cómico y comentarista político Bill Maher. Netflix hizo la misma apuesta, pero con la ventaja del soporte, retando al resto a que hicieran lo mismo. Pues bien, HBO ha cruzado la frontera y ha decidido competir con Netflix en su propio mundo pero con el catálogo impresionante de la HBO en estos años, que van desde Los Soprano a Juego de Tronos, Trube Blood, Mad Men, Girls o Boardwalk Empire, por citar algunos ejemplos.

Es la gran apuesta para el próximo año: ofrecer un servicio de televisión online por suscripción. Algo que se mascaba cuando el CEO de la cadena, Richard Plepler, insinuó que era el futuro y que estaban trabajando en algo parecido. Es un camino abierto y los más valientes lo han adoptado. Según los cálculos de HBO, sólo en EEUU hay 80 millones de usuarios potenciales sin “pescar”, y hay que llegar hasta ellos. No se han dado más detalles sobre este futuro servicio “para no alertar a los competidores”, toda vez que si a HBO le sale rentable serán muchos otros canales los que seguirán sus pasos.

La competencia con Netflix (50 millones de usuarios directos, mucho más que la mayor parte de canales) está servida, pero no sólo con ellos, también con Yahoo Screen, o con la futura Apple TV si finalmente la compañía de la manzana se decide a saltar a la arena de los contenidos audiovisuales más allá de una máquina que hace televisión a la carta al usuario. Y su ejemplo podría ser el espejo en el que se miraran en el futuro muchos otros países. De funcionar se podría extender un nuevo sistema de distribución que con el tiempo abarcara también el cine y se solucionaran muchos de los problemas de audiencia que tiene hoy. Cerrando la puerta, además, a la piratería más descarada.