‘Solo en Casa’ cumple 25 años. Macaulay, como Haley Joel Osment o Lindsay Lohan, no supo hacerse mayor. Pero otros, como Natalie Portman, Anna Paquin o Emma Watson, sí.
“Nunca trabajes con niños, con animales o con Charles Laughton” (Alfred Hitchcock).
El director británico nunca entendió en qué consistía eso de lo políticamente correcto. No le interesaba. Esa transgresión de los convencionalismos sociales formaba parte de su talento y encanto. Hitchcock no dudó en volar (literalmente) uno de los códigos más sagrados del cine: los niños. En ‘Sabotaje’ (1936), no se cortó con la explosión de una bomba, que desconoce la víctima pero no el espectador, en un autobús al lado de un niño.
Hitchcock, en su archiconocida conversación literaria con François Truffaut, admitía el ‘error’: “A lo largo del trayecto, el personaje del niño se hace excesivamente simpático para un público que luego no me perdona que lo haga morir cuando la bomba estalla con él en el autobús”.
Conclusión: Nunca trabajes con niños.
Claro que no todos los directores, ni mucho menos, han mostrado tan descaradamente rastros de pedofobia (ojo, no confundir con la pedofilia) como Hitchcock. Los niños han sido habituales personajes en el cine y la televisión. Y con ellos, la figura del niño/a actor/actriz.
Un inagotable filón desde los primeros años de Hollywood, con sus propias estrellas: Shirley Temple, Mary Pickford, Judy Garland, Jackie Cooper, Mickey Rooney… Con el paso de los años, el cine español también popularizó a sus propias estrellas infantiles, a menudo ligadas a la música: Joselito, Marisol…
¿Pero qué pasa cuando esos niños actores se hacen mayores? ¿Qué pasa cuando esos niños tan monos dejan de tener gracia cuando son adultos? Nacen los juguetes rotos.
¡Que se lo digan a Macaulay Culkin! Este próximo lunes, 16 de noviembre, se cumplirán 25 años desde el estreno de ‘Solo en Casa’ (Chris Columbus, 1990). 25 años desde el comienzo de una carrera artística tan vertiginosa en el ascenso como en la caída: la de Macaulay Culkin.
Macaulay Culkin en ‘Solo en Casa’ y, abajo, en la actualidad
¿Qué ha sido de Macaulay Culkin y de los últimos niños actores?
El rubito Culkin, con su traviesa e infantil mirada, apoyado en un notable guion de John Hughes, resultó la clave del abrumador éxito mundial de ‘Solo en Casa’, una comedia familiar navideña que reventó las salas de cine: número uno en la taquilla de Estados Unidos y número dos en la taquilla mundial del año 1990, con una recaudación total de 476,7 millones de dólares, solo por detrás de ‘Ghost’ (Jerry Zucker) (505,7 millones), pero por delante de ‘hits’ históricos como ‘Pretty Woman’ (Gerry Marshall), ‘Bailando con Lobos’ (Kevin Costner), ‘Desafío Total’ (Paul Verhoeven), ‘Regreso al Futuro III’ (Robert Zemeckis), ‘La Jungla de Cristal 2’ o ‘Presunto Inocente’ (Alan J. Pakula).
Culkin, sobrino de la actriz Bonnie Bedelia (la esposa de John McClane-Bruce Willis en ‘La Jungla de Cristal’), había entrado en el mundo de la interpretación con apenas cuatro años. Cuando rodó ‘Solo en Casa’, ya conocía las cámaras de cine. Fue John Hughes quien propuso a Culkin para la película. Habían coincidido en ‘Solos con Nuestro Tío’ (1989), con un papel secundario, al lado de uno de los grandes cómicos de Estados Unidos, el añorado John Candy.
Un gran acierto. Con ‘Solo en Casa’, comenzó una rápida carrera: ‘Mi Chica’ (Howard Zieff, 1991), ‘Solo en Casa 2: Perdido en Nueva York’ (Chris Columbus, 1992), ‘El Buen Hijo’ (Joseph Ruben, 1993), ‘El Guardián de las Palabras’ (Joe Johnston, 1994) y ‘Niño Rico’ (Donald Petrie, 1994). Culkin tenía un caché de gran estrella de Hollywood: hasta ocho millones de dólares por película en 1994, máximo en una estrella infantil.
No pudo, en cambio, con el divorcio y la codicia de sus padres, que se pelearon por la fortuna del hijo, y con el inexorable paso de los años y el peso del papel que le había dado la fama: Kevin McCallister en ‘Solo en Casa’. Y Culkin pasó de estrella infantil a juguete roto, a convertirse en una fábrica de rumores y noticias en las páginas de sociedad: emancipación judicial de sus padres a los diecisiete años, tempranero matrimonio (con 18 años) con su novia de la infancia, Rachel Miner, y tempranero divorcio, cuatro años después, una profunda amistad con Michael Jackson (al que defendió de la acusación de abusos de menores) e incluso una detención, en el año 2004, por posesión de marihuana y otras sustancias sin receta médica.
La carrera artística de Macaulay Culkin era pasado. Juguete roto. Culkin, tras casi una década alejado del cine, intentó regresar en la escena independiente: ‘Party Monster’ (Fenton Bailey y Randy Barbato, 2003), ‘Salvados’ (Brian Dannelly, 2004) y ‘Sex and the Breakfast’ (Miles Brandman, 2007). Fracasó. Ya no era el gracioso Kevin McCallister. El niño de ‘Solo en Casa’ no supo hacerse mayor. Estaba acabado como actor. Culkin ironizó sobre su propia situación profesional en una campaña de publicidad de una compañía de seguros en 2009 en la que se preguntaba: “¿Te acuerdas de mí?”.
No es que haya mejorado mucho desde entonces. De Culkin, que ha aparecido brevemente este verano en la sit-com ‘The Jim Gaffigan Show’ (TV Land) haciendo de sí mismo, apenas si hemos sabido en los últimos tiempos por su relación con la actriz Mila Kunis, que rompieron a principios de 2011 tras ocho años de convivencia, y por el actual demacrado aspecto físico del actor, extremadamente delgado. Los rumores sobre la muerte de Culkin son recurrentes en la red. A sus 35 años, solo queda el recuerdo de aquel rubito Kevin que se las apañó, solo en casa, para desbaratar los planes de un par de ladrones mientras llenaba las salas de cine de todo el mundo.
Natalie Portman en ‘El Profesional’ y Anna Paquin en ‘El Piano’
Macaulay Culkin es el arquetipo de juguete rojo. ¿Cómo le ha ido a sus compañeros de generación?
Hay de todo. Ser una estrella infantil no tiene necesariamente que ser un impedimento para triunfar de adulto. Natalie Portman es el mejor ejemplo. Con doce años, rodó ‘El Profesional (Léon)’ (Luc Besson, 1994), al lado de Jean Reno. Un debut nada sencillo. Nada de una comedia familiar, género habitual en los actores infantiles. Una estrella diferente desde sus primeros pasos en el cine, con una enorme madurez. “Prefiero ser inteligente que una estrella de cine”, sentenció en el pasado mes de mayo a los alumnos de la Universidad de Harvard. La princesa Amidala en la segunda trilogía, primera en el desarrollo de los hechos, de ‘La Guerra de las Galaxias’ (1999-2005) ha trabajado con Anthony Minguella (‘Cold Mountain’, 2003), Mike Nichols (‘Closer’, 2004), Milos Forman (‘Los Fantasmas de Goya’, 2006), Wong Kar-Wai (‘My Blueberry Nights’, 2007), Jim Sheridan (‘Hermanos’, 2009) y Kenneth Branagh (‘Thor’, 2011), además de protagonizar ‘V de Vendetta’ (James McTeigue, 2006), adaptación del cómic de culto de Alan Moore y David Lloyd. Portman, que ganó el Oscar a la Mejor Actriz por su papel en ‘Cisne Negro’ (Darren Aronofsky, 2010), ha recogido, en cierto modo, el testigo de otra niña actriz que se hizo estrella, con voz propia, de adulta: Jodie Foster, quien con trece años rodó ‘Taxi Driver’ (Martin Scorsese, 1976), con Robert de Niro.
Christina Ricci y Anna Paquin superaron también el salto de niña a mujer en el cine. Ricci arrasó entre el público infantil en ‘Casper’ (Brad Silberling, 1995) y creó escuela en la cultura gótica con su papel de Miércoles Addams en ‘La Familia Addams’ (Barry Sonnenfeld, 1991). Se mantuvo activa en el cine independiente, aunque ha ido a menos con los años: ‘La Tormenta de Hielo’ (Ang Lee, 1997), ‘Lo Opuesto al Sexo’ (Don Roos, 1998), ‘Pecker’ (John Waters, 1998), ‘Miedo y Asco en Las Vegas’ (Terry Gilliam, 1998), ‘Sleepy Hollow’ (Tim Burton, 1999), ‘Todo lo Demás’ (Woody Allen, 2003), ‘Monster’ (Patty Jenkins, 2003)…
Mientras, Anna Paquin, que ganó el Oscar a la Mejor Actriz de Reparto por ‘El Piano’ (Jane Campion, 1994) con once años, apenas uno menos que Tatum O’Neal por ‘Luna de Papel’ (Peter Bogdanovich, 1973), ha saltado con éxito de estrella infantil a actriz adulta gracias a la saga ‘X-Men’, como la mutante Pícara, y la serie ‘True Blood’ (HBO) (2008-2014).
Lindsay Lohan, Abigail Breslin y Dakota Fanning, tres formas distintas de crecer
Desigual suerte han tenido otras actrices infantiles de la generación Culkin y post-Culkin: las gemelas Ashley y Mary Kate Olsen (‘Padres Forzosos’, ABC, 1987-1995), Thora Birch (la hija de Harrison Ford como el agente Jack Ryan en ‘Juego de Patriotas’, 1992, y ‘Peligro Inminente’, 1994), Mayim Bialik (‘Blossom’, NBC, 1991-1995), Mara Wilson (‘Matilda’, 1996), Lindsay Lohan (el remake de ‘Tú a Londres y Yo a California’, 1998), Emma Watson (Hermione Granger en la saga Harry Potter, 2001-2011), Dakota Fanning (‘Yo Soy Sam’, 2001), Abigail Breslin (nominada al Oscar a la Mejor Actriz de Reparto por ‘Pequeña Miss Sunshine’, 2007), Hailee Steinfeld (nominada también a los Oscar por ‘Valor de Ley’, 2011) y Quvenzhané Wallis (candidata al Oscar en la categoría de Mejor Actriz por ‘Bestias del Sur Salvaje’, 2013).
Las gemelas Olsen atesoran una gran fortuna (300 millones de dólares), gracias a sus negocios en el mundo de la moda, pero lo cierto es que no han triunfado como actrices desde ‘Padres Forzosos’. Thora Birch se nos hizo mayor en ‘American Beauty’ (Sam Mendes, 1999), aunque Mena Suvari y su baño entre pétalos de rosas le quitó casi todo el protagonismo. Birch convenció a los más cinéfilos en ‘Ghost World’ (Terry Zwigoff, 2001), pero su carrera no ha terminado de explotar. Mientras, la televisión sigue siendo el medio donde mejor se mueve la antigua Blossom, estrella de ‘The Big Bang Theory’ (CBS) desde la tercera temporada, como pareja del doctor Sheldon Cooper (Jim Parsons). Mara Wilson no ha tenido tanta suerte. La actriz, que se alejó del cine por iniciativa propia, fue noticia el pasado verano tras conocerse que ha tenido serios problemas de depresión y ansiedad.
Lo de Lindsay Lohan es más complicado de explicar. La antigua estrella Disney no se ganará la vida como actriz salvo un viraje radical de su carrera y, sobre todo, de su cabeza. Lohan compite, con más años de antigüedad en el ‘cargo’, con Miley Cyrus a la hora de destrozar por completo su imagen de niña buena de la factoría Disney. Escándalo tras escándalo. La vida de Lindsay Lohan discurre entre problemas con la justicia, a menudo relacionados con las drogas, clínicas de rehabilitación y escándalos sexuales. De cine, nada. Más que juguete roto, cabeza rota.
Las nominadas al Oscar tampoco lo están teniendo fácil. Abigail Breslin ya no es la simpática chica de gafitas de ‘Pequeña Miss Sunshine’. Apareció en ‘Agosto’ (John Wells, 2013) y ‘El Juego de Ender’ (Gavin Hood, 2013) y forma parte del reparto actual de la serie ‘Scream Queens’ (FOX), pero lo que más se ha sabido de ella ha sido su desplante, en forma de canción, hacia su exnovio Michael Clifford, guitarrista y vocalista de 5 Seconds of Summer. Ya sin las trencitas de ‘Valor de Ley’, Hailee Steinfeld ha abierto también un camino alternativo hacia la música. Este pasado viernes 13 de noviembre ha sacado al mercado su primer disco: ‘Haiz’. Quvenzhané Wallis, la nominada más joven al Oscar con diez años, sí avanza con fuerza. Tras ‘Bestias del Sur Salvaje’, protagonizó una nueva versión del musical ‘Annie’ (Will Gluck, 2014), un clásico en Broadway. Wallis recibió una nominación a los Globos de Oro. El próximo 4 de diciembre, llegará a la cartelera española con un drama familiar, ‘De Padres a Hijas’ (Gabrile Muccino), con Russell Crowe, Amanda Seyfried, Aaron Paul y Diane Kruger.
Quienes sí que se han convertido definitivamente en actrices son Dakota Fanning y Emma Watson. Fanning cuenta ya con un currículo notable desde su primer filme, ‘Yo Soy Sam’ (Jessie Nelson, 2001), y su periodo de formación con Spielberg en la serie ‘Abducidos’ (Sci-Fi Channel) (2002) y ‘La Guerra de los Mundos’ (2005). Tiene pendiente de estreno ‘The Benefactor (Franny)’ (Andrew Renzi), junto con Richard Gere. Ewan McGregor ha elegido a Fanning para su debut como director en ‘American Pastoral’, adaptación de la homónima novela de Philip Roth. A Dakota le ha salido competencia en casa con su hermana Elle, la Princesa Aurora de ‘Maléfica’ (Robert Stromberg, 2014).
A Emma Watson la tenemos aún en la cartelera en ‘Regresión’, lo último de Alejandro Amenábar. No reniega de su papel como Hermione Granger en Harry Potter, pero está más que claro que Watson será, sin duda, quien tenga más recorrido de aquella hornada de nuevos actores que salieron de la adaptación cinematográfica de la saga de J.K. Rowling. La actriz británica no ha tenido prisas en volcarse en el cine. Antes terminó sus estudios de Literatura Inglesa en la Universidad de Brown (Estados Unidos). Watson, a diferencia de otras precoces actrices de su generación, tiene la cabeza muy bien amueblada. Hace apenas un año, dejó con la boca abierta a la misma Asamblea de la ONU con un discurso sobre la igualdad de género. Ya centrada en el cine, sus últimos títulos son: ‘Noé’ (Darren Aronofsky, 2014), ‘Regresión’ (Alejandro Amenábar, 2015), ‘Colonia’ (Florian Gallenberger, 2015) y ‘La Bella y la Bestia’(Bill Condon), con fecha de estreno para 2017. Y es solo el principio.
De Emma Watson podemos y debemos esperar más que de sus dos compañeros en Harry Potter: Daniel Radcliffe y Rupert Grint. Al pelirrojo Grint le va a costar mucho quitarse la cara de Ron Weasley. Desde el final de la saga Harry Potter, se le ha visto más en el teatro que en el cine, donde sus apariciones se resumen en papeles secundarios en películas igualmente secundarias. Su compañero Daniel Radcliffe tiene más posibilidades para ser alguien más que Harry Potter en el cine. Radcliffe, que el pasado jueves recibió su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood por su papel en la saga de J.K. Rowling, rompió con fuerza con su pasado de actor infantil con la obra de teatro ‘Equus’ (2007), con un alto contenido erótico. Aunque para el gran público seguirá siendo Harry Potter, el actor británico ha iniciado una interesante carrera con presencia tanto en el cine independiente como en el comercial. El próximo 25 de noviembre, se estrenará su próxima película: ‘Victor Frankenstein’ (Paul McGuigan), una nueva adaptación del gran clásico de Mary Shelley donde Radcliffe interpreta al jorobado Igor.
Haley Joel Osment, Edward Furlong y Jonathan Lipnicki, casi olvidados
Tras Macaulay Culkin y junto con Daniel Radcliffe, el gran nombre de la nueva hornada de niños actores es, sin duda, Haley Joel Osment, que tiene ya 27 años. Debutó con un pequeño papel en ‘Forrest Gump’ (Robert Zemeckis, 1994), como el hijo de Forrest y su amada Jenny. Pero el papel que le dio la fama internacional fue otro muy distinto: el atormentado niño de ‘El Sexto Sentido’ (1999), el blockbuster por excelencia de M. Night Shyamalan. Ya saben: “En ocasiones veo muertos”. Haley Joel Osment no solo aterró a los espectadores, también a la crítica, con una doble nominación a los Oscar y los Globos de Oro. Y comenzó su breve época de éxito como niño actor: ‘Cadena de Favores’ (Mimi Leder, 2000), ‘Hijos de un Mismo Dios’ (Yurek Bogayevicz, 2001), ‘A.I. Inteligencia Artificial’ (Steven Spielberg, 2001) y ‘El Secreto de los McCann’ (Tim McCanlies, 2003). Desapareció prácticamente del cine y, como a demasiadas jóvenes estrellas, le dio por jugar con el alcohol y las drogas y encadenar problemas con la policía: el ‘síndrome Drew Barrymore’. Solo que, a diferencia de la niña de ‘E.T.’ (Steven Spielberg, 1982), Haley Joel Osment no ha conseguido volver con éxito al cine con una, hasta ahora, poco interesante carrera en la escena independiente.
Otros actores infantiles de la era Culkin o post-Culkin son Kirk Cameron (‘Los Problemas Crecen’) (ABC) (1985-1992), Fred Savage (‘Aquellos Maravillosos Años’) (ABC) (1988-1993), Michael Oliver (‘Este Chico es un Demonio’, 1990), Edward Furlong (‘Terminator II: El Juicio Final’, 1991), Jason James Richter (‘Liberad a Willy’, 1993), Jonathan Lipnicki (‘Jerry Maguire’, 1996) y Angus T. Jones (‘Dos Hombres y Medio’ ) (CBS) (2003-2015). Una nómina muy desafortunada.
Cameron pasó de ser un adolescente ligón en ‘Los Problemas Crecen’ a un adulto obsesionado con propagar la religión. Savage ha aparcado casi por completo su faceta como actor (fue Número Tres en ‘Austin Powers en Miembro de Oro’, 2002) y trabaja, sin gran relevancia, como director de series de televisión. Michael Oliver no pasó de ser niño ‘diablillo’. Algo más han hecho Jason James Richter y Jonathan Lipnicki, aunque siempre en cintas de bajo presupuesto. Es el reto que tiene entre sus manos Angus T. Jones tras acabar ‘Dos Hombres y Medio’. Gracias a la serie fue el actor infantil mejor pagado en la televisión, para alegría de su familia, con 300.000 dólares por episodio.
¿Y Edward Furlong? Tiró por la basura una carrera artística más que prometedora tras debutar con apenas catorce años en uno de los remakes más importantes de la historia del cine: ‘Terminator 2’ (1991), junto con James Cameron, Arnold Schwarzenegger, Linda Hamilton y Robert Patrick. Hasta que la cocaína y la heroína se cruzaron en su camino, Furlong apareció en filmes tan interesantes como ‘Antes y Después’ (Barbet Schroeder, 1996), al lado de Meryl Streep y Liam Neeson, y ‘American History X’ (Tony Kaye, 1999), con Edward Norton. Las drogas y problemas serios y recurrentes de violencia de género han arruinado la carrera de un actor físicamente irreconocible desde sus tiempos de ‘Terminator 2’.
Los niños del cine español: Ivana Baquero, Andoni Erburu, Juanjo Ballesta y Clara Lago
¿Y en el cine español? Los niños actores también han ocupado su espacio, como Andoni Erburu, ganador del Goya con apenas diez años por ‘Secretos del Corazón’ (Montxo Armendáriz, 1997) ante otro precoz talento, Fernando Ramallo, nominado por ‘Carreteras Secundarias’ (Emilio Martínez Lázaro, 1997). Erburu vive alejado por completo del cine tras acabar estudios de Ingeniería Técnica Agrónoma. Ramallo, ya con 35 años, sigue siendo actor. Tuvo buenas oportunidades como ‘El Corazón del Guerrero’ (Daniel Monzón, 1999) y ‘Krámpack’ (Cesc Gay, 2000), aunque no ha terminado por triunfar. Lo último de Ramallo es ‘Cuervos’ (2014), un thriller de Raúl Romera que no ha llegado a las salas de cine.
Los Goya, que hace cuatro años establecieron un límite de edad (dieciséis años) para los futuros candidatos, se fijaron antes en varios niños: Manuel Lozano por ‘La Lengua de las Mariposas’ (José Luis Cuerda, 1999), Juanjo Ballesta por ‘El Bola’ (Achero Mañas, 2000), Clara Lago por ‘El Viaje de Carol’ (Imanol Uribe, 2002), Ivana Baquero por ‘El Laberinto del Fauno’ (Guillermo del Toro, 2006), Nerea Camacho por ‘Camino’ (Guillermo Fesser, 2008) y Marina Comas por ‘Pa Negre’ (Agustí Villaronga, 2010).
Lozano, como Erburu, ha estado más preocupado por los estudios: Arquitectura en su caso. Si bien no ha abandonado el cine y la televisión, aunque sin repercusión para el gran público, como en dos recientes miniseries de la TVG, la televisión autonómica gallega: ‘Códice’ (2014) y ‘Hotel Almirante’ (2014). La carrera de Ballesta, que emocionó en ‘El Bola’, ha ido de más a menos: ‘El Viaje de Carol’ (Imanol Uribe, 2002), ‘El Embrujo de Shanghai’ (Fernando Trueba, 2002), ‘Planta 4ª’ (Antonio Mercero, 2004), ‘7 Vírgenes’ (Alberto Rodríguez, 2005), ‘Cabeza de Perro’ (Santi Amodeo, 2006), ‘Entrelobos’ (Gerardo Olivares, 2010) y la serie ‘Hispania’ (Antena 3) (2012-13).
A las niñas les ha ido mejor, sobre todo a Clara Lago e Ivana Baquero. Claro Lago, que vivió el éxito histórico de ‘Ocho Apellidos Vascos’ (Emilio Martínez Lázaro, 2014), ha estrenado ya dos películas en este año: ‘Extinction’ (Miguel Ángel Vivas, 2015) y ‘Ahora o Nunca’ (María Ripoll, 2015) y volverá a la cartelera el próximo viernes con la continuación de ‘Ocho Apellidos Vascos’: ‘Ocho Apellidos Catalanes’ (Emilio Martínez Lázaro, 2015). Ivana Baquero ha relanzado su actividad como actriz en los últimos tres años con títulos como ‘Mi Otro Yo’ (Isabel Coixet, 2013), ‘El Club de los Incomprendidos’ (Carlos Sedes, 2014), la cinta portuguesa ‘Hielo’ (Gonçalo Galvão Teles y Luís Galvão Teles, 2015), ‘Demonios Tus Ojos’ (Pedro Aguilera), que acaba de rodar, y la serie de la MTV ‘The Shannara Chronicles’, que se estrenará el próximo 5 de enero. Nerea Camacho no ha repetido, en cambio, el éxito de ‘Camino’. Su último papel importante fue en la serie ‘Bienvenidos al Lolita’ (Antena 3) (2014). Marina Comas avanza sin prisas en proyectos de televisión en Cataluña.
El salto de niño (incluso adolescente) actor a adulto tampoco ha sido o está siendo sencillo para la gran cantidad de chavales descubiertos por la televisión. ¿Qué será de Ricardo Gómez cuando acabe ‘Cuéntame’ (TVE) (desde 2001). Habrá que esperar para conocer el desenlace.
Una cosa está clara. El consejo de Hitchcock de no trabajar con niños no ha tenido una gran acogida. Otra cosa es que esos niños hayan sabido dar el salto a adultos en el cine, la televisión e incluso en sus propias vidas.
