Tres libros para mayor gloria del ilustrador y dibujante Max, conocido por muchos lectores por su línea clara y sus trabajos para el suplemento Babelia por ejemplo. En ellos reúne, por ejemplo, sus trabajos en prensa con su personaje Bardín.

Hay muchos personajes en ‘Bardín el superrealista’ (La Cúpula), ‘El regreso de Ulises’ y ‘Sillón de orejas ’(Nórdica). Son el trabajo de muchos años de Max (Francesc Capdevila, 1956), un ilustrador muy peculiar que parece salido estéticamente de la mente de Hergé y que hizo de la línea clara y el simbolismo sus armas frente a la realidad. Muchas son obras para prensa, como la serie Sillón Orejero para el suplemento Babelia de El País, pero otras son creaciones propias sin más ambición que expresar pensamientos y visiones diferentes. Es el caso de Bardín, un personaje capaz de saltar entre universos paralelos. Definido como “superrealista” y que es una de las muchas caras de este ilustrador y dibujante que tiene en algún lugar de su casa el Premio Nacional de Cómic de 2008. Precisamente Bardín fue una de las razones para dárselo.

Pero fuera de ese alter ego recurrente que viene y va en su producción artística hay sitio para muchos otros. Por ejemplo con Ulises, un rey de Ítaca muy particular, la enésima versión que se hace sobre este personaje telúrico de la civilización occidental (el primer occidental, según muchos). Max lo desnuda y los convierte en un ser nuevo: un exiliado, un emigrante, un ilegal, un shakesperiano “extraño en tierra extraña” que entronca con el errante rey heleno por el Egeo en busca de su patria anhelada. En este libro surgido a raíz de un texto de Alberto Manguel el mundo es muy diferente del que dibujaron los versos de Homero: ya no se puede viajar libremente sino que hay que pedir papeles en cada puerto. El mundo es un gran mosaico multiétnico donde algunos de los valores de Ulises no van a ser bien vistos por determinada gente. La histeria cultural colectiva que sacude al mundo globalizado se ceba en el mito.

El próximo mes de marzo saldrá el último, la reunión de muchas de las ilustraciones hechas para El País y el suplemento Babelia. En la sección Sillón de Orejas Max convertía en ilustraciones los pensamientos de Manuel Rodríguez Rivero. Son casi 350 dibujos de otras tantas semanas de trabajo incansable en el que convertía en dibujos simbólicos los lugares de la cultura descritos en palabras. El trabajo del traductor del lenguaje a imágenes siempre es más que necesario, bienvenido. Un buen ejemplo son esas fotografías fijas de Max en las que cobraba forma la metáfora.

El regreso de Ulises - Max

Ulises y Bardín (abajo), dos de las grandes creaciones de Max (Imágenes: Nórdica Libros)