Andreu Buenafuente regresa después del “coitus interruptus” con el público de este año; en el escenario, sólo con Berto Romero y con un espectáculo de improvisación donde sólo se conoce el 30% del guión.

‘Nadie sabe nada’ se construye en tiempo real, tendrá tres partes diferentes, empezando con una charla entre los dos actores en la que intentarán conocer más cosas el uno del otro. Eso da lugar a unas dosis de improvisación muy altas que harán que la gente disfrute de un show diferente con cada representación. Y lo harán en castellano, a pesar de que la primera parte de la gira será en Cataluña (entre el 12 de diciembre y el 6 de enero).

Según Buenafuente “nos siguen en toda España, y sabemos que hay gente que vendrá a Barcelona para vernos, lo haremos en castellano aunque, al utilizar tanto la improvisación, a lo mejor sale el catalán e incluso el inglés. La verdad es que en España nos quieren mucho. La gente es igual en todas partes, y nos reciben con una normalidad que está bien comentar ahora en los tiempos que corren”.

 

 

En la segunda parte se enfrentarán a la actualidad y recogerán los principales titulares de la jornada, analizándolos desde su particular punto de vista. Y de remate, una canción alimentada por temas de muchas ramas: política, drogas, música, deportes… Buenafuente ha indicado que lo que más les sorprenda del día lo colocarán en la canción, con melodías que podrán ir del bolero a la sardana. En la tercera parte, los dos artistas se enfrentarán, sin red, a las preguntas que el público les formule por escrito antes de entrar a la función y que habrán depositado en una urna.

No esconden, por otra parte, que un espectáculo de estas características sólo es posible si existe una “gran complicidad” entre los actores del escenario, lo que, de momento, todavía se da entre ellos. Respecto a la gira, amanecerán en Cornelllá y luego viajaran con el show al Paral-lel hasta el 6 de enero. Reivindicadores del humor, aún en tiempos de dificultades, Berto Romero ha defendido que se trata de buscar la excelencia, “lo que no han hecho ni los del sistema político ni los del sistema financiero”.