El ser humano es un gran explorador en la pantalla. ‘After Earth’, de M. Night Shyamalan, con Will Smith y uno de sus hijos, Jaden, y ‘Oblivion’, protagonizada por Tom Cruise, son las últimas propuestas en un año 2013 lleno de aventuras espaciales.
Les propongo un viaje por mundos desconocidos, por mundos que todos hemos soñado alguna vez por recorrer. Les propongo un viaje por el universo a través del cine. La Tierra ha sido objeto en numerosas películas de visitas amistosas o bélicas de razas extraterrestres. Pero el Séptimo Arte, desde sus inicios, también se ha aventurado a viajar por la galaxia. La o la necesidad del ser humano por conocer otros planetas para sobrevivir ha sido una recurrente realidad en las salas de cine. Y casi desde el principio. ¿Quién no recuerda el rostro de la luna con un ojo atravesado por un cohete espacial en ‘Viaje a la luna’ (1902), de Georges Méliès? Es, sin duda, una de las imágenes icónicas del cine y la primera demostración de su duradero amor con el espacio.
La ficción caminaba por delante de la realidad. El hombre necesitó casi siete décadas más para vivir en persona las precursoras, oníricas y ‘surrealistas’ imágenes de Méliès, inspiradas en obras maestras de la literatura de ciencia ficción como ‘De la tierra a la luna’ (1865), de Julio Verne, y ‘Los primeros hombres en la luna’ (1901), de H.G. Wells. La curiosidad y los constantes avances científicos en la primera mitad del siglo XX alimentaron las primeras experiencias cinematográficas en la galaxia. En pleno desarrollo tecnológico, la carrera espacial era un reto. Los espectadores soñaban con surcar en breve las estrellas en filmes modestos, alejados de las superproducciones, como ‘Viaje a Marte’ (1918), ‘La mujer en la luna’ (1929), del alemán Fritz Lang, ‘Con destino a la luna’ (1950) ‘De la tierra a la luna’ (1958) e incluso ‘Barbarella’ (1967), con Jane Fonda en el planeta ficticio Lythion en el año 4000.
‘After Earth’
‘Oblivion’
La inminente llegada del hombre a la Luna, el 20 de julio de 1969, cambió la relación del cine y la incipiente televisión con los viajes intergalácticos y la exploración de otros mundos. Al espíritu aventurero se unieron dilemas morales, como en ‘2001: una odisea del espacio’ (1968, Stanley Kubrick), peligros inesperados, como en ‘El planeta de los simios’ (1968), protagonizada por Charlton Heston con su archiconocido final ‘terrícola’, y la necesidad de buscar nuevos planetas donde vivir como en la serie de televisión ‘Perdidos en el espacio’ (1965-1968), con una familia que huye de una superpoblada Tierra. El cine, una vez “conquistada” la Luna, empezó a cuestionar qué nos esperaba en aquellas desconocidas realidades.
Más original al ánimo explorador es ‘Star-trek’ (1966-1969), que alumbró una saga compuesta por otras cinco series y doce filmes, el último, titulado ‘Star-trek: en la oscuridad’ y dirigido por J.J. Abrams, se estrenará el próximo 17 de mayo en Estados Unidos y el 5 de julio en España. “El espacio: la última frontera. Estos son los viajes de la nave estelar ‘Enterprise’, en una misión que durará cinco años, dedicada a la exploración de mundos desconocidos, al descubrimiento de nuevas vidas y nuevas civilizaciones, hasta alcanzar lugares donde nadie ha podido llegar”. La voz en off de William Shatner, el capitán Kirk, nos introducía en la producción audiovisual que más ha explorado el universo.
El espacio, ese mundo desconocido por recorrer y colonizar, generó otra saga imprescindible en el cine: ‘Star Wars’, creada por George Lucas, con una trilogía inicial entre 1977 y 1983 que es magia pura del celuloide. En esta ocasión, la aventura espacial no responde a las ansias por descubrir nuevos mundos, ni a la necesidad espiritual o física por sobrevivir. La saga de ‘La Guerra de las Galaxias’ es cien por cien entretenimiento. Una segunda trilogía, entre 1999 y 2005, con mejores efectos especiales, pero sin la mágica ingenuidad de las tres primeras películas, alegró a los millones de seguidores del universo creado por George Lucas, que tendrán nueva ración triple. J.J. Abrams, tras su experiencia con ‘Star-trek’, dirigirá el primer proyecto, que se estrenará en 2015.
‘Star Wars’
Con los éxitos de ‘Perdidos en el espacio’, ‘Star-trek’ y ‘Star Wars’ y la llegada del hombre a la Luna, el cine espacial alcanzó notoriedad y profundidad. ‘2001: una odisea del espacio’ y ‘El planeta de los simios’ fueron las pioneras de ese nuevo tratamiento. ‘Alien, el octavo pasajero’ (1979) (Ridley Scott) lo confirmó. Los ‘ocho’ tripulantes (gato incluido) de la nave Nostromo eran atacados por una malvada criatura en su viaje de regreso del ficticio planeta Thedeus con un cargamento de veinte millones de toneladas de mena. El espacio dejaba de ser un lugar amigable. Sigourney Weaver se convirtió, de paso, en la primera gran heroína de acción. ‘Alien’ contó con tres secuelas y una precuela, ‘Prometheus’ (2012), dirigida por el mismo Ridley Scott, aunque sin la teniente Ripley a bordo.
Los encuentros, en la tercera fase y en la pantalla, entre seres humanos y extraterrestres eran cada vez más habituales en la Tierra, pero también las expediciones espaciales. El hombre no ha vuelto a pisar la Luna desde 1972 y aún no ha llegado a Marte. Sin embargo, en el cine es un avezado colonizador. Nuevamente, se mezcla la curiosidad por conocer nuevos mundos con la necesidad de encontrar una alternativa a una vida en peligro en la Tierra. El cine cada vez sale más a menudo al espacio en busca de aventuras, siguiendo el espíritu de ‘Viaje a la luna’. Entre otras, ejemplos cercanos son ‘Elegidos para la gloria’ (1983, Philip Kaufman), ‘Exploradores’ (1985, Joe Dante), ‘Desafío total’ (1990, Paul Verhoeven), ‘Stargate, puerta a las estrellas’ (1994, Roland Emmerich), ‘Apolo XIII’ (1995, Ron Howard), ‘Horizonte final’ (1997, Paul W. S. Anderson), ‘Gattaca’ (1997, Andrew Niccol), ‘Space cowboys’ (2000, Clint Eastwood), ‘Pitch black’ (2000, David Twohy), ‘Misión a Marte’ (2000) (Brian de Palma), ‘Solaris’ (2002, Steven Soderbergh) y ‘Pandorum’ (2009, Cristian Alvart).
‘Starship Troopers’
Pero el espacio, en el cine moderno, no es solo aventura. El temor a una amenaza externa, ya sean razas alienígenas como en ‘Starship Troopers’ (1997, Paul Verhoeven) y en la animada ‘Titan A.E.’ (2000, Don Bluth y Gary Goldman), un cometa como en ‘Deep Impact’ (1998, Mimi Leder), un asteroide como en ‘Armageddon’ (1998, Michael Bay) o el apagón del sol como en ‘Sunshine’ (2007, Danny Boyle), han obligado al ser humano a salir a la galaxia para garantizar la supervivencia de la Tierra. Las visitas a otros planetas se han efectuado también por una nueva amenaza: el mismo planeta que nos cobija. La creciente preocupación por el cambio climático ha llevado al hombre a buscar nuevos hogares donde vivir. En ‘Planeta rojo’ (2000, Antony Hoffman), la superpoblación y la contaminación obligan a colonizar Marte. El exceso de basura impulsa, por su parte, a abandonar la Tierra en el filme animado ‘WALL E’ (2008, Andrew Stanton). Mientras, en el último megaproyecto de James Cameron: ‘Avatar’ (2009), el hombre intenta colonizar Pandora y a sus habitantes, los Na’vi, para poder extraer un mineral que le permita seguir residiendo en la Tierra, que atraviesa una letal crisis energética.
El hombre no se cansa de recorrer el espacio y conocer nuevos mundos, ya sea por curiosidad o necesidad. ‘After Earth’ (M. Night Shyamalan), protagonizada por Will Smith y su hijo Jaden, y ‘Oblivion’ (Joseph Kosinski), con Tom Cruise, Morgan Freeman y Olga Kurylenko, son las dos grandes aventuras espaciales de un año 2013 repleto de filmes ambientados en la galaxia. Cuando el hombre colonice otros mundos, el cine, mucho antes, ya lo habrá hecho.
Clooney y Bullock solos en el espacio; Foster, tirana de ‘Elysium’
‘After earth’ (M. Night Shymalan) y ‘Oblivion’ (Joseph Kosinski) son la avanzadilla de un cine espacial muy prolífico en los próximos meses. Por las pantallas pasarán también ‘Last day on Mars’ (Ruairi Robinson), con una expedición de astronautas en el planeta rojo al estilo de ‘Misión a Marte’ (2000), de Brian de Palma; ‘Europa Report’ (Sebastián Cordero), con un equipo internacional de astronautas enviado a la cuarta luna de Júpiter; ‘Dead space’ (DJ Caruso), basada en un exitoso videojuego ambientado en un lejano sistema solar; y ‘Riddick’ (David Twohy), segunda secuela del famoso convicto espacial interpretado por Vin Diesel.
Más ambiciosas son ‘Gravity’, dirigida por Alfonso Cuarón y con Sandra Bullock y George Clooney, y ‘Elysium’, de Neill Blomkamp, con Matt Damon y Jodie Foster. Cuarón narra el desesperado intento de dos supervivientes de una misión espacial para regresar a la Tierra. Es el gran proyecto espacial de la segunda mitad de año. Su estreno se espera para octubre. Antes, en agosto llegará ‘Elysium’, una estación espacial reservada para los ricos y regida por una imperturbable Jodie Foster, mientras el resto de la humanidad vive en una Tierra hiperpoblada en 2159. Matt Damon liderará la revolución de las clases desfavorecidas.
Mientras, Warner Bros prepara la producción de ‘Robotech’, recreación de una afamada serie de animación japonesa, con los robots como protectores de la humanidad ante las invasiones alienígenas. Ya en 2014, llegará ‘Mass effect’ que, como ‘Dead space’, está basada en un exitoso videojuego y que recrea otra guerra intergaláctica.