‘Oblivion’ es su última gesta, donde Cruise es un ingeniero de drones que patrulla una Tierra asolada tras una guerra alienígena (estreno hoy viernes 12).
‘La tierra es un recuerdo por el que merece la pena luchar’. Es el lema con el que Universal Pictures nos vende ‘Oblivion’, la gran superproducción que nos llega este viernes a los cines españoles con un presupuesto de 130 millones de dólares. Tom Cruise está al frente de esta aventura de ciencia ficción que le sitúa en una devastada Tierra, en el año 2073, tras una guerra alienígena. Cruise interpreta a un exmarine que trabaja como ingeniero de Drones y que patrulla los cielos de un planeta que la inmensa mayoría de sus habitantes ha abandonado. Como no podía ser de otra manera, se convierte en el héroe que decidirá el destino de la humanidad. ‘Oblivion’ se ajusta como anillo al dedo de Cruise.
No es un rol novedoso. Se ha enfundado el traje de héroe en múltiples ocasiones en su filmografía. Y cada vez con mayor frecuencia. Con medio siglo sobre su espalda, resiste mejor que nadie como héroe de acción. Sus últimos proyectos como protagonista: ‘Valkiria’ (2008), ‘Noche y día’ (2010), ‘Misión-Imposible-Protocolo fantasma’ (2011), ‘Jack Reacher’ (2012) y ahora ‘Oblivion’ (2013) cumplen esas características.
Cruise ha apostado definitivamente por el cine de acción y por el papel de héroe. El próximo trabajo del actor, ‘All you need is kill’, dirigida por Doug Liman, director de ‘El caso Bourne’ (2002) y ‘Sr. y sra. Smith’ (2005), mantendrá ese perfil. Cruise volverá a salvar al mundo. Interpretará a un militar degradado que vivirá una y otra vez la misma batalla, lo que le permitirá encontrar las claves para derrotar a unos invasores espaciales. Emily Blunt y Bill Paxton le acompañarán en el reparto de un film basado en una novela de ciencia ficción del japonés Hiroshi Sakurazaka.
‘Oblivion’
“Lleva tres décadas siendo el héroe del cine, su mayor estrella, y nunca descansa. Está comprometido hasta el final en dar lo mejor de sí mismo. Cualquier otro en su posición se lo tomaría con más calma a estas alturas de su carrera. Él, no”, resume Joseph Kosinski, director de ‘Oblivion’. ¿Ha renunciado Tom Cruise a proyectos más ‘serios’? En principio, sí. En su filmografía reciente, ‘Leones por corderos’ (2007), un drama político dirigido por Robert Redford y en el que comparte protagonismo con Meryl Streep, es una excepción. El cine de acción le ha atrapado. Para encontrar filmes con otra temática habría que retroceder aún más tiempo: ‘Magnolia’, de Paul Thomas Anderson, y ‘Eyes wide shut’, de Stanley Kubrick, ambas estrenadas en 1999.
De guaperas a héroe
No siempre ha sido así en su carrera. Cruise comenzó como aspirante a ‘guaperas’. Apoyado en su sonrisa, triunfó en la simpática ‘Risky business’ (1983), de Paul Brickman. Un filme de clarísima estética y espíritu ‘ochentero’ que le valió una nominación a los Globos de Oro como mejor actor de comedia o musical. Cruise, bailando en calzoncillos al son de ‘Old time rock and roll’, de Bob Seger, pasó a empapelar las carpetas de las jóvenes de medio mundo.
Su cara de niño bueno y su imagen de ‘guaperas’, pese a su corta estatura, le acompañarían hasta la aparición de un personaje clave en su filmografía: el agente especial Ethan Hunt, con el ‘remake’ de la famosa serie de televisión ‘Misión: Imposible’. Una saga de cuatro películas que comenzó en mayo de 1996 y que ha recaudado en todo el mundo más de dos mil millones de dólares. Casi nada. Con ‘Misión: Imposible’ (1996) se puso en marcha, además, su productora, junto con su agente, Paula Wagner.
‘Misión Imposible’
Ethan Hunt descubrió a un héroe del cine de acción. Cruise se adaptó a la perfección a ese traje mientras intentaba en cada filme el más difícil todavía. Atrás quedaron comedias ligeritas como ‘Cocktail’ (1988) o románticas como ‘Un horizonte muy lejano’ (1992), con la dirección de Ron Howard y la réplica de su entonces esposa, Nicole Kidman. Había nacido el Tom Cruise héroe de acción, una vía que había explorado de una manera más modesta en ‘Top Gun’ (1986) y ‘Días de trueno’ (1990), ambas a las órdenes del recientemente fallecido Tony Scott.
En esa primera etapa, Cruise no renunciaba a protagonizar filmes serios para huir de su imagen de actor de consumo para jovencitas. Mostró sus credenciales de notable intérprete en ‘El color del dinero’ (1986), al lado, ni más ni menos, que de Paul Newman y Martin Scorsese; ‘Rain Man’ (1988), con Dustin Hoffman y Barry Levinson; ‘Algunos hombres buenos’ (1992), con Jack Nicholson, Demi Moore y Rob Reiner en la dirección; ‘La tapadera’ (1993), de Syney Pollack, con Gene Hackman; y ‘Entrevista con el vampiro’ (1994), de Neil Jordan, al lado de Brad Pitt, Antonio Banderas y una inolvidable adolescente Kirsten Dunst.
‘Nacido el 4 de julio’
Fue, sin embargo, con ‘Nacido el 4 de julio’ (1989), de Oliver Stone, con la película con la que terminó por convencer a la crítica. Cruise encarnó a Ron Kovic, un veterano de Vietnam que regresó a su país paralizado de cintura hacia abajo. La película, basada en las memorias del propio Ron Kovic, conocido activista antibélico, supuso la primera nominación del actor a los Premios Oscar. No levantó la estatuilla. Una decepción que ha arrastrado desde entonces y que, con el paso de los años y nuevas interpretaciones que merecieron mejor consideración (‘Algunos hombres buenos’, ‘La tapadera’ o ‘Entrevista con el vampiro’), terminó por inclinar a Cruise hacia el cine de acción, donde disfruta colgándose en afilados riscos o conduciendo coches y motos. ‘Jerry Maguire’ (1996), de Cameron Crowe, fue un dulce regalo de despedida, con Globo de Oro y nominación al Oscar incluidos. Ethan Hunt había ganado la batalla a Ron Kovic. Cruise se entregó de lleno al cine de acción tras filmar ‘Eyes wide shut’ y ‘Magnolia’, con la que volvió a quedarse a un paso de la estatuilla.
Superados los cuarenta años en una gran forma física, ha optado por divertirse y amasar dinero. Cruise es el héroe de las taquillas, mientras salva al mundo en la pantalla: ‘Misión: Imposible II’ (2000), ‘Vanilla sky’ (2001), ‘Minority report’ (2002), ‘El último samurái’ (2003), ‘La guerra de los mundos’ (2005), ‘Imposible: Imposible III’ (2006), ‘Valkiria’ (2008), ‘Noche y día’ (2010), ‘Misión: Imposible-Protocolo fantasma’ (2011), ‘Jack Reacher’ (2013), ‘Oblivion’ (2013) y la próxima ‘All you need is kill’ (2014). Entre medias, un brillante papel de antihéroe, aunque con una muerte dulcificada, en ‘Collateral’ (2004), de Michael Mann, amargando al taxista Jamie Foxx; el drama político ‘Leones por corderos’ (2007); la locura cómica ‘Tropic Thunder’, de Ben Stiller, con un papel secundario; y la comedia musical ‘La era del rock’ (2012), de Adam Shankman.
Antes de que acabe el año (en España habrá que esperar al 11 de enero) estrenará Jack Reacher, el salto al cine de un personaje salido de un bestseller que convierte de nuevo a Cruise en un héroe de armas tomar. Jack Reacher es un antiguo policía militar que se lo ha montado por su cuenta, que vive al margen de la sociedad y que de pronto se ve inmerso en el caso de un francotirador que ha disparado a cinco personas. Cruise se abrocha, de esta manera, una vez más el traje de salvador de la humanidad. ‘Oblivion’ es el próximo ejemplo del gran héroe de acción del cine norteamericano. Con él, Hollywood y la humanidad están seguros.
Filmes de acción de Tom Cruise: ‘Top Gun’ (1986) (Tony Scott); ‘Días de trueno’ (1990) (Tony Scott); ‘Misión: Imposible’ (1996) (Brian de Palma); ‘Misión: Imposible II’ (2000) (John Woo); ‘Vanilla sky’ (2001) (Cameron Crowe); ‘Minority report’ (2002) (Steven Spielberg); ‘El último samurái’ (2003) (Edward Zwick); ‘La guerra de los mundos’ (2005) (Steven Spielberg); ‘Imposible: Imposible III’ (2006) (J.J. Abrams); ‘Valkiria’ (2008) (Bryan Singer); ‘Noche y día’ (2010) (James Mangold); ‘Misión: Imposible-Protocolo fantasma’ (2011) (Brad Bird); ‘Jack Reacher’ (2013) (Christopher McQuarrie); ‘Oblivion’ (2013) (John Kosinski) y la próxima ‘All you need is kill’ (2014) (Doug Liman).