Nada da más dinero que hurgar en la memoria nostálgica y sentimental de una generación: se pueden hacer maravillas, como un recopilatorio que lleve las siglas EGB en portada.
Nada da más dinero que hurgar en la memoria nostálgica y sentimental de una generación: se pueden hacer maravillas, como un recopilatorio que lleve las siglas EGB en portada.