Las señales están ahí desde hace mucho tiempo, pero pocos se han querido dar cuenta hasta que ha sido demasiado tarde. Las investigaciones iniciadas hace años ya dan sus frutos, y revelan el inquietante escenario que se ha creado.
Las señales están ahí desde hace mucho tiempo, pero pocos se han querido dar cuenta hasta que ha sido demasiado tarde. Las investigaciones iniciadas hace años ya dan sus frutos, y revelan el inquietante escenario que se ha creado.
Ya no cabe ninguna duda de que los océanos son el director de orquesta climático, el regulador que abre o cierra los ciclos atmosféricos que son, junto con terremotos y volcanes, las principales amenazas y benefactores de la vida humana en la Tierra. Sus circunstancias son vitales para nuestra existencia, a pesar de que gobiernos, empresas y mucha gente desinformada lo relativice. Tres noticias recientes demuestran su importancia y lo ajenos (e inconscientes) que somos.