Una parte fundamental de la conversión de ‘Blade Runner’ en un clásico fue la banda sonora compuesta por Vangelis, que, curiosamente, no sería publicada hasta doce años después del estreno, en 1994. No fue la mejor banda sonora de la Historia del Cine, pero era una pieza creativa clave para apuntalar el universo estético que creó Ridley Scott en el filme.