El dibujante Francisco Ibáñez, ‘padre’ de Mortadelo y Filemón, el botones Sacarino, Rompetechos, Pepe Gotera y Otilio o 13 rue del Percebe, celebra su 75 aniversario dibujando en su mesa de trabajo. Para Ibáñez, el secreto de su éxito intergeneracional con Mortadelo y Filemón a la cabeza se debe “a una sola palabra: guión, guión y guión, porque, aunque yo admire mucho a los dibujantes, el lector no nos pide obras de arte que puedan estar en el Museo del Prado, sino una trama bien lograda”.
Francisco Ibáñez, Gran Premio Salón del Cómic al conjunto de su obra en 1994 y Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en el 2001, asegura que “los premios son muy bonitos, tengo miles de premios, pero cada persona es un premio para mí, todos aquellos que hacen cola para que yo les firme mis historietas son mi mayor premio”. Ibáñez no tiene intención de jubilarse mientras el público le siga queriendo y su máxima en esta vida es “a seguir, a seguir, a seguir, con contrato indefinido hasta que la gente se aburra de mí, porque no hay contrato que valga si el público no te responde”, subraya.