Las ventas son, prácticamente, un tercio que en el comienzo de la crisis. El número de espectadores en conciertos tampoco retrocede a niveles del año 2006.
“Estamos siendo espectadores privilegiados del final de una era, y no solo en lo que al disco respecta, sino para la música española en general: en breve, dedicarse al oficio de músico puede ser un lujo al alcance de muy pocos”, sentencia Juan Puchades, director de EfeEme.com, en el último Anuario de la SGAE (Sociedad General de Autores y Editores), publicado esta semana.
¿Exagera Puchades? Desgraciadamente, no. El mercado discográfico no tiene nada que envidiar, en cuanto a penurias, al mundo del cine. Las facturas de la crisis, la piratería y la subida del IVA cultural del 8 al 21% en septiembre del año pasado tienen unas consecuencias demoledoras en el sector. En 2012, el mercado discográfico se cerró con unas ventas de 12.3 millones de unidades, un millón menos que en 2011.
El sector, aunque parezca casi imposible, sigue cayendo. Cada año explora un nuevo mínimo. El mercado discográfico se ha quedado en un tercio de las ventas que tenía antes de la crisis. En 2007, las ventas ascendían a 33.7 millones de unidades. No obstante, ya entonces las cifras eran preocupantes. Antes del parón de la economía española y mundial, las ventas de música estaban cayendo con fuerza. En España, se superaron los 46 millones de unidades en 2006. La piratería estaba causando estragos.
El CD, que forma parte de la vida de millones de generaciones, está viviendo su ocaso. Según el Anuario de la SGAE, las ventas han pasado de 39.5 millones en 2006 a apenas 11.4 millones en 2012. Poco que comentar ante la abrumadora realidad de unos números que también son negativos en el mercado de los DVD y VHS musicales. El descenso es muy llamativo, de 2.5 millones en 2006 a apenas 295.000 unidades en 2012.
“Definitivamente, se ha producido una irreconciliable desafección entre el consumidor musical y esos objetos circulares llamados discos. Los usos y costumbres han cambiado de tal modo que hoy el disco tiene muy poco valor como objeto en sí mismo (…). Para, por lo menos, un par de generaciones no significa nada e, incluso, en el grueso de la sociedad se ha instalado la idea de que no merece la pena gastar dinero en ellos, algo razonable cuando todos sufrimos una crisis económica terrorífica que obliga a reducir gastos, y para colmo, conseguir gratis las grabaciones musicales sólo es cuestión de invertir unos segundos en ello”, analiza Puchades.
Mercado digital
La caída de las ventas ha provocado, evidentemente, una disminución muy importante en la recaudación: 141 millones de euros en 2012, son siete millones menos que un año antes. Un retroceso nimio si lo comparamos con la evolución en los últimos seis ejercicios anuales. El sector facturaba más de 300 millones de euros en 2007. Desde entonces, ha perdido más de la mitad de su mercado. Insostenible.
A pesar del desplome de las ventas en soporte físico, se mantienen como la principal fuente de ingresos (92.7 millones). El mercado digital, que supone el 34.4% del sector, aportó una recaudación adicional de 48.2 millones, casi dos millones más que en 2011. Crece, pero a un ritmo insuficiente para compensar las pérdidas en los canales tradicionales. Las suscripciones (18.5 millones), las descargas de internet (14.6) y el ‘streaming’ (11.7) encabezan el mercado digital en España.
La oferta digital de servicios online de descarga legales es cada vez más numerosa: 7digital, Beatport, Blinko (Buengiorno), Dada, Deezer, eMusic, Fnac, IbizaDanceClub.com, iTunes, Jamba, Last.fm, Los40.com, Magnatune, Media Markt, Movistar, MTV, Music Unlimited, MySpace, Nokia Music, Olemovil (Jet Multimedia), Orange, rara.com, Rdio, Rockola.fm, Spotify, Tuenti, Vodafone, Yes.fm, Yoigo, Vodafone y Zune.
Sin embargo, el mercado digital en España sigue por detrás del físico. No sucede ya así en países tan importantes en el mundo de la música como Estados Unidos, Australia y Suecia. No son excepciones, la cuota del mercado es también mayoritariamente digital en Dinamarca, Noruega, China, India, Malasia, Tailandia o Ecuador. Y está cerca de serlo en Reino Unido o Canadá.
A la industria discográfica española, que recaudó 166.6 millones en 2012, lo que supone un descenso anual de casi 9 millones, la salva, en parte, los ingresos de comunicación pública y radiodifusión (radio y televisión, clubes nocturnos, barras, restaurantes…). Representan un 19% del mercado, más que en ningún otro país del mundo, según expone el Anuario de la SGAE. Hablamos de casi 25 millones de euros.
El año de Pablo Alborán
En cuanto a los discos más vendidos, 2012 fue el año de Pablo Alborán, ganador por partida doble con ‘Tanto’ y ‘En acústico’ y con su homónimo ‘Pablo Alborán’ en quinta posición. ¡Tres álbumes entre los cinco primeros de la lista de superventas! El cantante malagueño encabeza un ‘top ten’ dominado por la música española con la presencia, además, de Alejandro Sanz (‘La música no se toca’), Sergio Dalma (‘Vía Dalma II’), Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina (‘La orquesta del Titanic’) y Melendi (‘Lágrimas desordenadas’).
Completan el ‘top ten’ una BSO de la serie infantil de Disney ‘Violetta’ y dos únicos discos de artistas extranjeros tan diferentes como Adele y Bruce Springsteen. Un nuevo valor de la música popular británica y un histórico rockero estadounidense. ‘Adele’ aparece en la cuarta posición con ‘21’. Mientras, el ‘Boss’ es décimo con ‘Wrecking ball’. Son casi excepciones como Coldplay, decimoctavos con ‘Mylo Xyloto’, y el fenómeno adolescente One Direction, con el undécimo disco más vendido en España en 2012: ‘Take me home’.
Otros artistas españoles como Manu Carrasco, María Dolores Pradera, Malú, Miguel Bosé, Julio Iglesias, Manolo García y Estopa aparecen en la lista de los veinte álbumes con más éxito del pasado año. Para Juan Puchades, director de EfeEme.com, “claramente, el rock está en recesión en lo que a ventas se refiere, y el indie, del que tanto se habla y mueve grandes sumas de dinero merced al apoyo de marcas comerciales de todo tipo (contando además con un muy vistoso aparato mediático propio), simplemente no existe, es como una entelequia que provoca mucho ruido pero que genera pocas nueces”.
“Quienes compran música pertenecen a un perfil muy claro: público adulto que, a la vez, se divide de manera muy evidente en tres grandes perfiles: mujeres (que gustan de Pablo Alborán, Alejandro Sanz, Sergio Dalma, Manuel Carrasco o Miguel Bosé), un público más disperso que apuesta por valores ‘de toda la vida’ (Bruce Springsteen, Serrat y Sabina, Manolo García, Leonard Cohen, Dúo Dinámico, Julio Iglesias) y un tercer apartado más indefinible en el que entran fenómenos puntuales como Adele, Amy Winehouse o Lana del Rey”, resume Puchades.
Pablo Alborán
Los macrofestivales, una excepción
La crisis del sector discográfico se repite en los conciertos. El Anuario de la SGAE expone que en el pasado año se celebraron 116.446 recitales de música popular. ¿Son muchos? No parece, es el número más bajo desde 2004. Lógicamente, el volumen de espectadores y la recaudación se han resentido con, respectivamente, 26.1 millones de personas y 173 millones de euros. Nos encontramos con la cifra más baja de espectadores desde 2006 y la recaudación más limitada, incluso a pesar del empuje de la subida del IVA, desde 2007.
Los macrofestivales, con nuevas citas como el bianual Rock in Rio en Madrid, son la cara en el mundo de los conciertos. “Pero fuera del oasis del éxito de los grandes festivales, asociados a marcas como salvaguarda patrocinadora, y transitando por una realidad cada vez más alejada del día a día de las salas de conciertos, la situación sigue complicándose”, cuestiona Santi Carrillo, director editorial de Rockdelux, en el Anuario de la SGAE. El mayor precio de la entrada de los macrofestivales maquilla una caída de la recaudación que es superior en el resto de conciertos. Ha bajado de 142.3 millones a 135.7 millones.
Carrillo avisa de un negro panorama musical: “Si primero bajaron dramáticamente los ingresos por la venta de discos y después se empezó a tambalear el negocio de las actuaciones, parece cada vez más inviable que se consolide un circuito estable y, sobre todo, rentable que favorezca la sostenibilidad artístico- laboral para los francotiradores de la música”.
Los acordes que salen de la industria discográfica se aproximan más a un funeral que a una fiesta. La música en España, entre la crisis, la piratería y el IVA cultural, vive unos momentos, sin necesidad de dramatizar, críticos. Toca a funeral.
Álbumes más vendidos en España en 2012:
- ‘Tanto’ (Pablo Alborán).
- ‘En acústico’ (Pablo Alborán).
- ‘La música no se toca’ (Alejandro Sanz).
- ‘21’ (Adele).
- ‘Pablo Alborán’ (Pablo Alborán).
- ‘Vía Dalma II’ (Sergio Dalma).
- ‘La orquesta del Titanic’ (Serrat & Sabina).
- ‘Lágrimas desordenadas’ (Melendi).
- BSO Violetta (Varios artistas).
- ‘Wrecking ball’ (Bruce Springsteen).
- ‘Habla’ (Manuel Carrasco).
- ‘Take me home’ (One Direction).
- ‘Gracias a vosotros’ (María Dolores Pradera).
- ‘Dual’ (Malú).
- ‘Papitwo’ (Miguel Bosé).
- ‘1’ (Julio Iglesias).
- ‘Los días intactos’ (Manolo García).
- ‘Mylo Xyloto’ (Coldplay).
- ‘19’ (Adele).
- ‘2.0’ (Estopa).
- ‘Vía Dalma’ (Sergio Dalma).
- ‘Up all night’ (One Direction).
- ‘MDNA’ (Madonna).
- ‘Lioness: hidden treasures’ (Amy Winehouse).
- ‘Artesano’ (Miguel Poveda).
- ‘Nothing but the beat’ (David Guetta).
- ‘Wicked game’ (El Divo).
- ‘Live at the Royal Albert House’ (Adele).
- ‘Born to die’ (Lana del Rey).
- ‘Hacia lo salvaje’ (Amaral).
- ‘Believe’ (Justin Bieber).
- ‘Orígenes: El bolero’ (Café Quijano).
- ‘Old ideas’ (Leonard Cohen).
- ‘Mío’ (Bustamante).
- ‘Somos jóvenes: 50 años’ (Dúo Dinámico).
- ‘Otras verdades’ (India Martínez).
- ‘Cometas por el cielo’ (La oreja de Van Gogh).
- ‘El murmullo del fuego’ (Macaco).
- ‘Campamento Labandón’ (El Arrebato).
- ‘La colección definitiva’ (Alejandro Sanz).
- ‘Espejos’ (El Barrio).
- ‘Somos’ (Eros Ramazzotti).
- ‘Especies per catalogar’ (Els Amics de les Arts).
- ‘Diez’ (Antonio Orozco).
- ‘Lo mejor de Maná: Exiliados en la Bahía’ (Maná).
- ‘Calle Soledad’ (José Luis Perales).
- ‘Diciembre’ (Leiva).
- ‘La noche eterna. Los días no vividos’ (Love of Lesbian).
- ‘Frank Sinatra: Best of the best’ (Frank Sinatra).
- ‘Trece verdades’ (India Martínez).