Daniel Craig y Javier Bardem hacen pareja en la 23ª película de James Bond, ‘Skyfall’, un gran éxito en el mundo anglosajón que aspira el próximo 31 de octubre a continuar con el éxito en España.
Será un Bond más humano, más cínico que antes, y eso que la cara de piedra de Daniel Craig no ayuda mucho a darle humanidad; más humano, sí, pero también más desarraigado y oscuro. En frente el malo de la película, Bardem, deliberadamente afeado y “encabronado” para convertirse en lo que la crítica británica y americana ha llamado “el mejor villano posible contra Bond”. La película promete y Bardem se las ingenia para darle lustre al papel.
El madrileño borda a Silva, al que le añade un pelo rubio absurdo que corona con una personalidad muy difícil y psicótica que causa una desazón totalmente intencionada. Eso era, justamente, lo que quería el director, ha explicado. “Este villano es producto de muchísimas cosas, no algo que provenga de mí”. Los productores Barbara Broccoli y Michael G. Wilson; el director, Sam Mendes; la nueva “chica Bond” Naomi Harris, y los protagonistas de la película, Bardem y Craig, presentaron hoy en una rueda de prensa celebrada en Madrid esta multimillonaria producción (algo más de 156 millones de euros) que se estrena el 31 de octubre en España.
“Pero lo que yo sentía cada día era que hacíamos una película de bajo presupuesto, porque era trabajar las escenas, los diálogos, los personajes con una libertad extraordinaria, tanto que, para un monstruo de película como ésta (mi primer monstruo), no me lo esperaba”. Ambos actores han demostrado que la química existente en escena es auténtica, y la admiración, mutua. “Bardem es uno de los mejores actores que conozco, pero también un gentleman increíble”, dice Craig.
Javier Bardem como Silva
Sam Mendes explicó que para este Bond resucitado había que darle una pátina de oscuridad y pérdida de voluntad; es igual de violento y eficiente, pero también arrastra un cinismo propio del que ya no las tiene todas consigo. Mendes tiró de las primeras novelas de Ian Fleming, por eso “tiene conflictos personales, está deprimido con su vida, sabe que es un asesino, pero no conoce otro tipo de vida. Y bebe mucho”. La verdad es que el nuevo Bond ya no es infalible, falla cuando dispara, tiene graves secuelas de su última misión, en la que ha fracasado, y M (Judy Dench) le manda a tomar una ducha.
Craig, que reconoce su debilidad por el 007 Sean Connery y se declara fan de la cinta de Mendes, recuerda que su primer Bond fue ‘Vive y deja morir’ (1973), pero que “probablemente”, su favoritas son ‘Goldfinger’ (1964) y ‘Desde Rusia con amor’ (1963), a pesar de que todos han ido dando al personaje trozos de si mismos. Pero su “malo” favorito es el de Bardem, el actor español al que, cuando le preguntaron por quién es un buen malo de película, no dudó en decir que “los que rescatan a los bancos en vez de a las personas, y los que no piensan sinceramente lo que significa un desahucio”.