Adiós lento, agónico y lastimero del PC, hola a la comunicación que quepa en algo, lo que sea, que no sea más grande que la palma de una mano.

La herramienta que cambió para siempre la informática, que impulsó su expansión en el ámbito doméstico y que pasó de ser algo muy técnico de empresas y científicos a un electrodoméstico más, está en su fase de decadencia o reconversión. La venta de ordenadores personales cayó un 14% en los primeros tres meses del año, la mayor caída en dos décadas de las estadísticas proporcionadas por IDC, que había pronosticado una caída del 7,7%.

Es una tendencia iniciada años atrás por la irrupción de la doble pinza que le están haciendo al viejo invento de IBM que luego todos los demás asimilaron e incluso mejoraron: a un lado las tabletas, al otro, los smartphones. Las cifras reales oscilan entre el 9% y el 14%, pero todas dan el mismo resultado: el PC, como concepto, se hunde ante el avance de tener en una mano teléfonos que son ordenadores camuflados y tabletas que de manera intuitiva (hasta un bebé puede usarlos) simplifican el aparatoso ordenador personal de toda la vida, teclado, ratón y monitor incluidos.

Y los ordenadores portátiles, sucesores del viejo PC, no levantan cabeza tampoco: es precisamente la caída en picado de la demanda de este formato lo que ha lastrado a esta familia de dispositivos, claramente hundidos por la competencia de las mencionadas tabletas, más baratas, con menos peso, y mayor duración de la batería. Y por el camino se va también al garete el tradicional software que hacía de los PC algo tan atractivo: Microsoft lleva años redoblando esfuerzos para lograr crear sistemas que conviertan los ordenadores en tabletas. Sus programas Windows se reciclan y servían de tirón para el PC año tras año, porque la gente los compraba para tener el Windows, pero ahora ya no ocurre así. Además, Windows 8, el último, se centra en los portátiles con pantalla de retina, táctiles, que son todavía más caros.

 

Ventas y mercados

El líder mundial de los fabricantes, HP, se mantiene en su posición, con un 15,7% del mercado, pese a un descenso de ventas el 24% respecto al primer trimestre de 2012, según IDC. Lenovo, con 15,3%, se mantiene en segunda posición, por delante de Dell, Acer y Asus, todos con descensos de doble dígito. En el caso de Acer, casi del 30%. Además, HP no para de bajar ventas de manera brutal y Lenovo las sube, por lo que quizás el año que viene sea ya el mayor fabricante mundial. Ni siquiera Apple ha sido inmune: sus Mac, verdaderos impulsores del PC durante los 90 y la primera década del siglo, hasta que ellos mismos mataron el invento con el iPad y el iPhone, ha caído un 7,5% en su territorio más fuerte, Estados Unidos, siendo el número tres del país, por detrás de HP y Dell.