El grupo cómico más influyente de la historia de la televisión y el cine, creadores de un canon no igualada hasta ahora en calidad e inteligencia, regresan una vez más, 30 años después.
Entre los 60 y los 80 germinó una idea: reírse con inteligencia, o mejor dicho, exportar el humor británico y refinarlo hasta hacerlo un hito histórico en la televisión (‘Monty Python’s Flying Circus’) y el cine (‘Los caballeros de la mesa cuadrada’, ‘La vida de Brian’, ‘El sentido de la vida’, por poner tres ejemplos). Fueron un punto y aparte, quizás una de las últimas grandes aportaciones culturales de Inglaterra al mundo y la coronación de un particular estilo audiovisual y teatral británico que hizo escuela.
Los cinco miembros supervivientes del mítico grupo cómico Eric Idle, John Cleese, Terry Gilliam, Michael Palin y Terry Jones (Graham Chapman murió de cáncer en 1989) presentaron hoy en Londres su solitario y único día de regreso (por ahora), el 1 de julio de 2014 en el O2 Arena de Londres. No habrá más. Las entradas se pondrán a la venta el 25 de noviembre, y a buen seguro que se agotarán en minutos y habrá récords de reventa. Como corolario los ingredientes de esa gala única: música, comedia “y sexo anciano”. Si tiene el suficiente éxito planean repetirla en otras ciudades de Gran Bretaña o incluso en otros países. Es decir, que en EEUU no habría problemas para representar el show.
Michael Palin, Eric Idle, Terry Jones, Terry Gilliam y John Cleese
Los Monty Python vuelven por dos razones: porque el ansia de las legiones de fans de todas las edades y de al menos tres generaciones por verles de nuevo ya es muy grande, y porque, según ellos, había que hacerlo antes de que el adiós fuera definitivo, en una referencia muy del grupo de la muerte. John Cleese recordó que en el fondo lo que la gente quiere es volver a verles como eran antes, un revival en toda regla porque su trabajo ha sido poco menos que canonizado por los fans durante los últimos 40 años. “Lo que realmente la gente quiere ver es lo viejo, pero no lo queremos hacer de una forma predecible, así que… creo que será una mezcla”, dijo, añadiendo que el problema es que muchos fans se saben de memoria los diálogos de sus sketches mejor incluso que ellos.
Terry Jones informó de que la BBC sigue poseyendo los derechos de explotación del material del grupo, y que el show de julio será grabado para luego planear una emisión en televisión. A eso habrá que añadir, no seamos ingenuos, la consiguiente edición en DVD, Blu-Ray o copia digital. Lo que no habrá son películas: ahí cada uno sigue con sus carreras individuales y no había agenda para juntarles a todos durante meses. O ganas. Porque los rumores de que siguen manteniendo viejas cuitas entre ellos no han desaparecido.
Los seis originales (Chapman, segundo por la izquierda) en los años 70
Los Monty Python empezaron su propia leyenda en 1969 cuando la BBC emitió el primer episodio de ‘Monty Python’s Flying Circus’, que duraría hasta 1974 y donde se convirtieron en un referente de éxito televisivo. Fueron los años del surrealismo absurdo absoluto, los del sketch del loro muerto, el Ministerio de los Andares Tontos, el alpinista de visión doble, la clase de autodefensa personal contra bananas y el del diccionario húngaro trucado… una lista tan larga como fans posee el grupo. Lo que vino después fue el éxito en el cine, donde reunieron primero lo mejor de esta serie en ‘And now something completely different’ en 1971 (en España fue traducida estúpidamente por ‘Se armó la gorda’), y después iniciaron su particular apostolado irreverente: en 1975 estrenaron ‘Monty Python and the Holy Grail’ (aquí ‘Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores’); en 1979 llegaría la más polémica de todas, ‘La vida de Brian’, una versión hilarante de un falso Jesús que va en paralelo al verdadero.
Finalmente, en 1983, llegaría la última de las películas que hicieron juntos: ‘El sentido de la vida’, dirigida por Terry Jones y que a modo de libro por capítulos recrean su visión de la vida y diferentes conceptos, desde el racismo al catolicismo, la sexualidad y los americanos. Recibió el premio especial de Cannes y ya no volverían a juntarse más. Algunos, por parejas o tríos, sí que lo hicieron, como en ‘Los Señores del Tiempo’ o ‘Un pez llamado Wanda’, pero poco más. Algunos, como Eric Idle, recuperaron parte del legado con musicales como ‘Spamalot’ o con la versión en formato de oratorio cómico en Covent Garden de ‘La vida de Brian’.