Falta todavía tiempo, pero de momento, y tras un cambio de presentador más que polémico (Billy Crystal por Eddie Murphy después de una frase estúpida del productor de la ceremonia metiéndose con los gays), la ceremonia de los Oscar “del fin del mundo” ya tiene poster oficial.
No es que resulte muy emocionante, y el diseño es más bien clásico, con la omnipresencia de uno de los pocos tipos que pueden aparecer desnudos en TV en EEUU, eso sí, bien tapado por una más que fálica espada que ya es marca de la casa de la estatuilla dorada más preciada jamás construida. El equivalente al Santo Grial del cine, lo digan o no los interesados. Es el tito Oscar, bautizado ya muy temprano así, y que más de un actor definió como “un vibrador dorado gigante” entre las copas de las fiestas de después. Eso sí, debía llevar uno en la mano.