El Festival de Salzburgo es uno de los más legendarios de Europa, pura música clásica y de lo mejor que puede albergar una ciudad que transpira música por los cuatro costados.
Arrancó el pasado jueves la agenda (aunque no será hasta el 26 de julio cuando el presidente de Austria lo inaugure oficialmente) y durará hasta el 1 de septiembre, y que tendrá el programa más amplio desde que hace 93 años empezara a ser uno de los referentes de este tipo de festivales, todos o casi todos concentrados en verano. Europa suena a partitura clásica en estos meses aparte de los clásicos festivales populares. Este año ofrece 280 actuaciones que incluyen óperas, obras de teatro y conciertos de todo tipo de formato. Y los precios no son para todos los bolsillos, y es un aviso: van entre los 5 euros de algunos conciertos al aire libre y los 400 euros de las grandes noches de ópera y conciertos de gala. En total se han ofertado 260.000 entradas.
Para esta edición se centrarán en los bicentenarios de Verdi y Wagner, paso obligado en 2013. ‘Los maestros cantores de Núremberg’ y ‘Rienzi’, del maestro alemán, o ‘Don Carlo’, ‘Nabucco’ y ‘Falstaff’, del italiano, se cuentan entre las óperas que sonarán este año. Y por supuesto, por encima de todos ellos, Wolfgang Amadeus Mozart, hijo natural de esta ciudad que vive por y para él (restaurantes, cafés, hoteles, auditorios, teatros… hasta los bombones) y del que han programado ‘Lucio Silla’ y ‘Così fan tutte’.
La Orquesta Filarmónica de Viena ofrecerá cinco audiciones, y también acudirán orquestas invitadas desde Roma, Múnich, Berlín, Leipzig o Tokio, Israel y Palestina. En cuanto a los nombres, también estará bien nutrido el festival, desde Grigory Sokolov a Christian Tetzlaff, Maurizio Pollini o el Cuarteto de Hagen, que actuará con un ciclo de Beethoven. La voz humana contará con Anna Netrebko, Jonas Kaufmann, Edita Gruberova, Cecilia Bartoli, Elina Garanca, Thomas Hampson o Plácido Domingo, que no se ha caído del programa a pesar de su embolia pulmonar.
Venezuela y la música
Otro de los acontecimientos destacados es la vuelta a Salzburgo de una amplia representación de El Sistema, el conjunto de orquestas y grupos venezolanos creado por el compositor José Antonio Abreu en los 70 para acercar la música a los niños pobres y que tan buenos resultados ha dado en estos años. Abreu será, además, el encargado de dar el otro discurso, y en español. Desde Venezuela llegarán hasta mil niños para catorce conciertos bajo la batuta de Gustavo Dudamel, el gran director del proyecto. Además de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar otros cinco conjuntos actuarán en la ciudad natal de Mozart, entre ellos la agrupación Manos Blancas, formada por niños y jóvenes con discapacidades físicas y cognitivas que actuará el día 8 en el prestigioso Mozarteum.
Dudamel con su orquesta