La editorial Ginger Ape sigue explotando a fondo a un carismático Luis Antón del Olmet con otros dos libros, dos inclasificables textos de serie negra que orbitan el periodismo y la afilada pluma del bilbaíno. 

La editorial, pionera en las descargas por internet y que abre camino en un sector todavía sin explotar de verdad en España, publica ‘Historias de asesinos, tahúres, daifas, borrachos, neuróticas y poetas’ y ‘La vampira de la calle de Poniente’, dos compendios de aquella España negra negrísima que él conoció como periodista y que son parte del compendio de las caras ocultas de una sociedad que se encaminaba hacia una dictadura, una república y una guerra civil.

El primer título es una gran compilación del talento retorcido pero brillante de Luis Antón del Olmet, una suma de relatos breves aparecida en 1913 donde se mezclan el realismo social con la mala baba y el talento psicológico del autor. Verbo fervoroso y que imita en muchos aspectos al desparpajo dickensiano para recrear personajes extremos en una sociedad costumbrista, pero aquí mirando siempre hacia esa España negra azabache que tanto juego ha dado a los escritores. Humanidad y desprejuicio son las claves de relatos donde Olmet da voz a los marginados y olvidados y en el que se unen varios géneros en un solo libro.

Portadas de ambos libros

En el segundo caso, ‘La vampira de la calle Poniente’, también tenemos un relato oscuro. Una crónica de sucesos y luego carcelaria de Enriqueta Martí, la vampira de la calle de Poniente, protagonista de un luctuoso suceso criminal que fue un escándalo en aquella España que arrancaba la centuria con la misma miseria que siempre pero donde los medios de masas ya hacían su trabajo. Todo ocurrió en una Barcelona catalanista y conservadora, obrera y anarquista, todo a la vez, donde la tal Enriqueta se había dedicado al secuestro, tráfico de menores, infanticidio, prostitución, curanderismo, nigromancia y vampirismo con la aquiescencia y negligencia muchas veces de las autoridades. Fue la piedra clave de una trama oscura que nunca terminó de aclararse y que se convirtió en una leyenda. Moriría en la cárcel entre sospechas de que había sido asesinada para evitar que hablara sobre la burguesía que la protegía.

El libro es una crónica periodística de aquellos días y hechos. Y todo tuvo su origen en la pluma periodística de Luis Antón del Olmet, el inicio de su primer texto sobre el suceso: “Barcelona 27 [de febrero de 1912], 2 tarde (URGENTE). Un guardia municipal ha encontrado esta mañana a la niña desaparecida. Estaba secuestrada por una mujer de cuarenta años, llamada Enriqueta Martí, en una casa de la calle de Poniente. Cuando el público ha conocido la noticia, se ha agolpado frente al domicilio de la Enriqueta, y para evitar un asalto, han tenido que acudir las fuerzas de orden público. Ampliaré detalles”.

Una vida peculiar que ha pasado sin gloria a la historia

Luis Antón del Olmet (Bilbao, 1886 – Madrid, 1923), periodista, escritor, director de El Debate, El Parlamentario, Revista Política, Parlamentaria y Financiera y colaborador de todos los grandes periódicos del primer tercio del siglo XX. Fue también parte de los movimientos agrarios de la época como Acción Gallega, luchó contra el caciquismo por conseguir una España más moderna que nunca llegaría. Transitó entre el conservadurismo originario hacia la izquierda, dotado de un estilo expresivo y castizo, con una imaginación fecunda que le hizo visitar géneros y formatos que en España eran poco menos que alienígenas. Su muerte llegó antes de tiempo: le pegó un tiro su antiguo amigo Alfonso Vidal y Planas. Ha dejado más huella por esto que por muchos de sus libros, a pesar de tener una imaginación desbordante y ser un estupendo periodista, miembro de una generación que haría Historia con mayúsculas en las letras y el arte de España.

Cómo funciona Ginger Ape

El funcionamiento de la iniciativa es sencilla: cada cliente puede, si lo desea y ordena su conciencia y ética, hacer una pequeña donación para sostener el proyecto empresarial y sus iniciativas como esta Ópera Pantagruélica que se ha encontrado con un texto tremendamente original para las circunstancias culturales en las que fue creado. Además, para quienes amen el papel en libros, Ginger Ape permite acceder a una versión impresa en exclusiva que únicamente “satisface los costes de impresión y los gastos de envío” como gasto.

Según la editorial, la meta que se han impuesto es emprender una serie de acciones orientadas a la difusión de nuestros conceptos y a la incentivación de la creatividad y los usos del sector editorial” según sus comunicados. Para ello han creado varias colecciones concebidas para albergar “algunas publicaciones que, generadas desde la propia editorial, abundan en su difusión y conocimiento entre el gran público; una colección que se proclama ajena al mercado y sus leyes y que encuentra inspiración en el espíritu del Copyleft y las políticas del Creative Commons”.