La exposición es una coproducción con el Centre d’Art La Panera de Lleida, a donde viajara en otoño, y su título hace alusión a un tiempo del calendario imposible e imaginario, que hace de las efemérides políticas un ritual absurdo. Se centra sobre todo en obras de los últimos quince años más piezas poco conocidas.
Artium presenta la mayor muestra realizada hasta la fecha por el artista donostiarra (Sala Sur, hasta el 17 de septiembre de 2017). Afincado en París desde comienzos de 1990, Pérez Agirregoikoa proyecta una mirada perspicaz y crítica sobre la ideología, la religión, el capitalismo, la educación y la cultura, temas a los que dedica sus dianas más mordaces. El título de la exposición hace alusión a un tiempo del calendario imaginario, que hace de las efemérides políticas y revolucionarias un ritual un tanto absurdo. La exposición se concentra en trabajos realizados en los últimos quince años, y también en algunas obras anteriores, inéditas o menos conocidas del artista.
Juan Pérez Agirregoikoa (Donostia-San Sebastián, 1963) utiliza en su trabajo medios elementales y poco espectaculares: pintura sobre papel, textos, pancartas de tela y técnicas básicas como el carboncillo y la acuarela. Como indica el comisario de la exposición, Peio Aguirre, “aunque en una primera mirada su obra es de fácil lectura, detrás de esa capa legible el artista nos presenta elaborados comentarios que hablan de nuestro modo de vida y el comportamiento humano con una gran carga irónica. Detrás de eslóganes declamatorios, el artista presenta una cuidada reflexión sobre los códigos de representación”. En general, el contenido de sus obras se apropia y subvierte los discursos sobre el poder, la religión y la obediencia; el artista se apoya también en su interés por la filosofía política y por los aportes teóricos de Jacques Lacan al psicoanálisis.
En ese sentido, la exposición ‘38 de julio – 37 de octubre’ presenta, por ejemplo, la serie ‘Ex-votos’ (1993-1994), en la que Pérez Agirregoikoa adopta esta forma popular de pintura religiosa poco elaborada para reproducir situaciones que mezclan realidad, ficción y mitología urbana. Otro caso es la obra ‘Lalangue Lavion’ (2011), para la que el artista realizó dos pancartas que fueron colocadas a modo de anuncios comerciales en la cola de una avioneta, sobrevolando la costa hasta las playas de San Sebastián en una calurosa tarde de verano. En las pancartas se podía leer “Marx, I love U. Will you marry me?” (Marx, te amo. ¿Te casarías conmigo?), y también “Il y a un ennemi” (Hay un enemigo). Toda la acción fue filmada dando como resultado un documento en vídeo.
‘Radio(a)phonie’ (2017)
En la exposición destacan asimismo dos producciones recientes en vídeo, ‘Letra morta/Dead Letter’ (2014) y ‘Radio(a)phonie’ (2017). El primero es el que Juan Pérez Agirregoikoa realizó con motivo de la Bienal de Sao Paulo de ese año. El artista filma en los suburbios de la ciudad brasileña una película basada en ‘El Evangelio según San Mateo’ de Pier Paolo Pasolini, pero centrándose en algunos pasajes del texto bíblico que el director italiano pasó por alto. En ese sentido, la película aborda por ejemplo la conocida como “parábola de los talento […] en la que el inversor de éxito es recompensado y el fracaso en los negocios castigado”, pasaje que para el artista es “clave para la configuración discursiva del capitalismo occidental”.
En segundo lugar, ‘Radio(a)phonie’ (2017) es un vídeo realizado ex profeso para esta exposición. Aquí el artista se centra en la relación entre política y educación. Basado en el mito de la caverna de ‘La República’ de Platón (es decir, los juegos de sombras y la reflexión sobre la representación, sobre cómo vemos las cosas y cómo son en realidad) y contando con un grupo de adolescentes, el vídeo es “una mirada crítica al panorama político y las ideologías que dominan nuestra realidad más inmediata”.
Junto a estas producciones en vídeo, Pérez Agirregoikoa presenta también series de dibujos realizados con carboncillo, acrílico y acuarela, en los que aborda temas como la condición del artista, como en ‘El síndrome Muntadas’ (2009), una serie de 37 dibujos al carboncillo en los que cuestiona, con sentido del humor, lo que se considera ser “un artista de éxito”. En otros dibujos se centra en cuestiones como la re-educación, la familia, la autoridad y “la cultura como forma de adiestramiento”.
It’s so romantic (2013)
Don’t call me dad (2006)