‘La por (El miedo)’ es una adaptación de la novela ‘M’, de Lolita Bosch. “No hay palabras, hay miradas”, resume el realizador catalán Jordi Cadena.

La violencia de género es una de las peores manifestaciones posibles de la sociedad española. 44 mujeres han fallecido en este año a manos de sus parejas o exparejas. Una violencia que también sufren los niños. Hace menos de cuatro meses, la Audiencia de Córdoba condenó a 40 años de prisión a José Bretón por el asesinato de sus dos hijos, Ruth, de 6 años, y José, de 2.  Hace escasos dos meses apareció en un bosque en las proximidades de Santiago el cuerpo sin vida de Asunta Basterra, de doce años. Sus padres adoptivos se encuentran en prisión acusados de un delito de asesinato.

El cine español ha abordado brillantemente el drama de la violencia de género, en especial con dos excelentes películas como ‘El bola’ (Achero Mañas) (2000) y ‘Te doy mis ojos’ (Icíar Bollaín) (2003) y otras producciones destacadas como ‘Celos’ (Vicente Aranda) (1999) o ‘Solo mía’ (Javier Balaguer) (2001). ‘La por (El miedo)’, que se estrena este viernes, se atreve con un paso más allá. Dirigida por Jordi Cadena (Barcelona, 1947), establece una aterradora tesis sobre la violencia como “algo inherente en nuestra sociedad”, explica el realizador catalán.

‘La por (El miedo)’, rodada en catalán, “no es una crónica social de la violencia de género, sino una reflexión sobre la violencia y el mal que nos rodea (…). No hay palabras, hay miradas”, resume Cadena. “Mi interés va más allá de exponer unos hechos que, día sí y día también, salen en los medios. Está en que el espectador se pregunte el porqué del comportamiento inhumano sin ningún atisbo de mala conciencia”, se cuestiona Jordi Cadena en su décimo largometraje. “Se trata de una película más de preguntas que de respuestas”, aclara.

El adolescente (16 años recién cumplidos) Igor Szpakowski, Ramón Madaula y Roser Camí conforman el eje de la historia, hijo mayor, padre y madre de una familia, con una segunda hija de siete años, golpeada por la violencia. Igor Szpakowski interpreta a Manel, un joven de 16 años que “solo piensa en poder empezar a trabajar pronto para huir del miedo, ese sentimiento tan fuerte que le paraliza”. Nadie sabe lo que sufre en su casa. Ni su novia. Ni su mejor amigo. Ni sus profesores. Ni su entrenador de baloncesto que sueña con convertirlo en un profesional. El miedo domina su vida.

 

‘La por (El miedo)’ participó en la sección oficial de la pasada edición de la Seminci, donde impactó por su estilo seco y minimalista. Está basada en ‘M’, de Lolita Bosch, una novela juvenil que insta a la sociedad a romper el tabú del silencio que provoca el miedo generado por la violencia de género. “He sido totalmente fiel a esa premisa. El silencio es una consecuencia del miedo, tensión que he intentado reflejar desde la primera secuencia y mantenerla a lo largo de la historia”, ha precisado el director catalán.

Es la segunda adaptación de Jordi Cadena a una novela de Lolita Bosch. Hace tres años, estrenó ‘Elisa K’, codirigida con Judith Colell, con la que ganó el Premio del Jurado en el Festival de San Sebastián y estuvo nominado a cinco Premios Gaudí y al Goya al Mejor Guion Adaptado. Con ‘La por (El miedo)’ firma una de las películas españolas más ásperas en los últimos años con un tratamiento de la violencia cortante: “parece inherente a la sociedad”. “No hay palabras, hay miradas”.

J. Cadena con dos de los protagonistas de la película durante la última Seminci