Oceanografía activa y divulgación, justo lo que más necesita una Humanidad que le ha dado la espalda al mar, convertido en patio de recreo, estercolero y explotada despensa que agoniza. Frente a la ignorancia y la mala educación de la especie reinante, un poco de pedagogía activa y útil gracias a Tristan Gooley y ‘Cómo leer el agua’ (Ático de los Libros), desde el 7 de marzo.

Tristan Gooley ha liderado expediciones de aventura en los cinco continentes, escalado montañas en Europa, África y Asia, navegado en pequeños barcos por el océano y volado en avioneta al Ártico. Ha saltado en paracaídas desde un rascacielos en Australia. Ha viajado con los tuareg, los beduinos y los dayak y ha estudiado los métodos por los que se orientan en algunas de las regiones más remotas de la tierra. Es la única persona viva que ha cruzado el Atlántico en solitario tanto en bote como en avión.

Uno no piensa en los charcos. Pero los charcos nos dicen mucho. Su posición en el camino nos puede ayudar a orientarnos. La naturaleza nos da mil pistas sobre el mundo que nos rodea. Están en las nubes, en los charcos, en el vapor, en la forma de las rocas. Cerca del setenta por ciento de nuestro cuerpo es agua. El agua nos rodea y nos da la vida, y forma parte de nosotros. Este libro no es un manual árido, sino una mezcla de viajes, ciencia y cultura. Desde Sussex hasta Omán, a través de los helados misterios de la Antártida y la Polinesia, Tristan Gooley revela los secretos de lagos, ríos y océanos descubiertos durante sus propias expediciones pioneras, y nos invita a acompañarlo en un viaje deslumbrante por los secretos del agua.

Empieza recordando el cuento persa de Abharah, quien, según la leyenda, salvó a unos mercaderes en el Índico al convencerlos de que cortaran el mástil de su barco, arrojaran su cargamento al mar y cortaran la cadena de su ancla, a pesar de que el tiempo parecía apacible. Poco después, un tifón azotó el barco, que no se hundió gracias a lo que Abharah les había hecho hacer. Abharah sabía que iba a venir la tormenta porque había sabido leer los isharat, una palabra que se puede traducir por “las señales” o “el conocimiento”. Había sabido leer el agua. En parte libro de aventuras y en parte ensayo literario y filosófico, Cómo leer el agua es una increíble guía moderna para conectar con la naturaleza, una celebración de la curiosidad y el conocimiento.

‘Cómo leer el agua’ es un libro imprescindible para los caminantes, marineros, nadadores, observadores de pájaros y de la naturaleza, en el que aprenderán a interpretar los lagos como un nativo de la Polinesia, a detectar aguas peligrosas en la más profunda oscuridad con la simple ayuda de un reloj, a leer el mar como un vikingo, a predecir el tiempo gracias al sentido de las olas, a descifrar las pautas del agua desde una playa, a descodificar el color del agua y a desentrañar el curso de un río como un experto geógrafo.

Tristan Gooley es navegante, aventurero y naturalista. Ha capitaneado un renacimiento en el raro arte de la navegación natural. Ha liderado expediciones a los cinco continentes, ha escalado cumbres en tres de ellos (una, en el Kilimanjaro), se ha tirado en paracaídas desde un edificio en Australia y ha estudiado los métodos de navegación de las tribus de las regiones más remotas de la Tierra. Es la única persona viva que ha cruzado en solitario el Atlántico en barco y en avión.
 
Escribe para el Sunday Times, el New York Times, The Wall Street Journal y ha colaborado con la BBC. Es miembro del Royal Institute of Navigation y de la Royal Geographical Society.