Algo majestuoso o terriblemente extraño debe salir de la mezcla del inclasificable Jodorowsky con la obra vital de Frank Herbert, ‘Dune’, saga fundamental de la ciencia-ficción moderna.
Sony ha publicitado ya el primer avance de ‘Jodorowsky’s Dune’, el documental sobre la película que pudo ser y no fue basada en la épica novela de Frank Herbert y que ya fuera llevada al cine por David Lynch; en aquella ocasión los productores montaron la película sin contar con Lynch, que la firmó pero luego para televisión no hizo lo mismo, con el apodo de Alan Smithee, es decir: “no reconozco el montaje”. Una saga extraña y fascinante en manos de dos directores fuera del gran circuito de Hollywood y que llenaron de imágenes sublimes más de una adolescencia. ‘Jodorowsky’s Dune’ se podrá ver en marzo.
Jodorowsky recuerda con una frase lo que supuso aquel proyecto que él inicio incluso antes que Lynch: “Quería hacer algo sagrado, una película que diera las alucinaciones de LSD… sin tomar LSD. Una película para cambiar las mentes jóvenes de todo el mundo“. El trailer demuestra mucha de esa ambición, storyboards y diseños de preproducción que recuerda vagamente (en algunos aspectos) a bocetos de Moebius, pero que aquí eran obra de H. R. Giger, futuro padre de Alien, y Dan O’Bannon en un época en la que la ciencia-ficción y los efectos estaban todavía algo en pañales. No sólo fue antes del ‘Dune’ que conocemos, fue incluso antes que apareciera ‘Star Wars’ y su revolución de efectos.
Jodorowsky revela también cuáles hubieran sido sus actores: David Carradine, Mick Jagger… y Dalí como el loco emperador de la galaxia. Y Orson Welles, al que sedujo con comida y cheques en blanco de control para que se sumara al proyecto. Jodorowsky lo quería todo, ansiaba hacer una película que él mismo definió como “Biblia de la ciencia-Ficción” a pesar de que no la leyó hasta que se la pasó un amigo. Quería una película enorme (en dinero y concepción) que marcara un punto de inflexión, imitar de alguna manera el verdadero punto de no retorno de la relación entre ciencia-ficción y cine que marcaría Stanley Kubrick en los 60 con ‘2001: Odisea del Espacio’.
Apenas diez años después de que Jodorowsky viera truncado su gran sueño cinematográfico, David Lynch sí estrenó su versión de Dune protagonizada por Kyle MacLachlan, Francesca Annis, Jürgen Prochnow, Patrick Stewart, Kenneth McMillan, Sting, Max von Sydow, Sean Young, Virginia Madsen. Fue una película extraña que no dejó contento a nadie pero que se convirtió en obra de culto andando el tiempo.
Diseños de carteles y de un decorado del proyecto de ‘Dune’ de Jodorowsky (bajo estas líneas)