El triste Wang es dueño de un bar de tallarines en una ciudad perdida. Su mujer tiene una aventura con un empleado en el bar, un hombre tímido llamado Li, que, muy a pesar suyo, debe esconder la pistola que su amante compró para matar a su marido. Pero Wang les observa y soborna al agente de policía Zhang para matar a la pareja. Sin embargo, nada es lo que parece, el plan perfecto se torcerá, la sangre correrá y la violencia hará de las suyas…

Zhang Yimou reversiona con una fuerza demoledora la vieja ‘Sangre fácil’ de los hermanos Coen en ‘Una mujer, una pistola y una tienda de fideos chinos’, libérrima apuesta de Yimou por darle la vuelta a una historia que fue el inicio fulgurante de los Coen Bros. Igual que Sergio Leone, que adoptó los Siete Samurais al western, ahora el director chino hace el camino inverso. Se estrena hoy mismo y aquí va el trailer para que vayáis abriendo boca.