El Museo del Prado ha pasado de los 2,1 millones de visitantes que acogía en 2006 a los 2,8 millones recibidos durante el presente año en su propia sede, y eso sin incluir los correspondientes a las exposiciones programadas con fondos propios en otras ciudades españolas (Prado Itinerante); todo un récord. 

Corren malos tiempos para la lírica y para todo lo demás, sea o no sea arte, pero lo cierto es que el Prado, la niña bonita de la  cultura española, con menos fondos y más ingenio ha logrado cuadrar su presente y aclarar el futuro. Está claro que nunca le faltará dinero, y que cuando los gestores del Prado buscan ayuda privada la van a encontrar por el impacto mediático e internacional que tiene una de las cuatro grandes pinacotecas del mundo.

Un buen espejo en el que mirarse, ya que ha paseado por España y el mundo sus joyas para recaudar dinero: en 2012 sus exposiciones externas han alcanzado los 370.000 visitantes, lo que eleva la cifra anual a casi 3,2 millones de visitantes totales. Este resultado supone un incremento del 8% sobre el año anterior, en el que se registraron 2,9 millones de visitantes. En paralelo a este incremento de visitantes y en relación con la mejora y ampliación de sus servicios y actividades, la institución ha logrado también fortalecer su autonomía financiera respecto al dinero público, pareciéndose cada vez más a los museos anglosajones.

Los ingresos propios conseguidos por el Museo durante este período, han ido aumentando año tras año partiendo del 34,7% aportado en 2007 hasta el 60% alcanzado durante el presente año 2012. “El aumento y mantenimiento de sus miembros Benefactores, junto a la promoción de distintas iniciativas de mejora del servicio público que presta, como la apertura de sus colecciones y exposiciones todos los días de la semana han contribuido también de forma decisiva incrementar y fortalecer esta autonomía financiera”, señalan los responsables del Museo. Otro dato relevante que influye a su vez tanto en el incremento de público como de ingresos propios, es el significativo crecimiento del número de socios particulares de la Fundación Amigos del Museo del Prado, que ha pasado de los 9.132 ‘Amigos’ con los que contaba en 2010 a los 22.831 con los que cuenta en la actualidad.

El edificio Jerónimos y la cuña de unión entre el mismo y el edificio Villanueva, sede histórica del Prado, junto al Casón del Buen Retiro, dotaron de 19.952 metros cuadrados más de superficie. Esta sustancial ganancia (de los 22.043 metros cuadrados disponibles en 2007 a los 41.995 disponibles en la actualidad, un 90,5% más) ha supuesto para el Museo poder disponer de los espacios y las instalaciones adecuadas para el desarrollo tanto de su actividad interna de conservación y custodia de una de las colecciones de arte más importantes del mundo, como de su actividad externa en relación con el público que lo visita o participa en sus actividades.