‘Ocho apellidos vascos’ ya es la película española más vista de la historia de este medio en España, un taquillazo de proporciones descomunales que podría ser una oportunidad para una industria acosada.
Los vascos y su sentido del humor redescubierto para el resto del país han hecho morder el polvo a Hollywood, que ha lanzado tres bestias consecutivas contra el filme de Emilio Martínez Lázaro sin éxito: ni ‘Noé’, ni ‘Capitán América 2’ ni ‘The Amazing Spiderman 2’ han podido con ‘Ocho apellidos vascos’ y su mezcla de humor en clave nacional. Sigue en primer lugar en la taquilla seis semanas después del estreno y amenaza con ser el órdago final de una industria en declive que busca desesperadamente clavos a los que agarrarse entre la piratería, la caída del consumo, la subida infame del IVA y un Gobierno dispuesto a cargarse el sector por motivaciones ideológicas.
La artillería pesada de Marvel lo ha intentado por dos veces (las dos películas sobre superhéroes) pero no hay manera. Allá arriba sigue la película protagonizada por un sublime Karra Elejalde, Dani Rovira, Clara Lago y Carmen Machi (que se multiplica en los últimos años entre el cine y el teatro, metida de lleno ya en el subconsciente del público español). Falta todavía por ver la reacción de esta película fuera de España, pero es obvio que sin conocer el contexto español del guión será complicado que un argentino, un mexicano, un francés o un italiano entiendan los chistes y las bromas secundarias de un texto pensado para que sólo los que han vivido en España se puedan “partir la caja” de risa desde el primer momento.
Pero vayamos a los números: ‘Ocho apellidos vascos’ alcanzó un registro (que aumentará en breve) a 6.525.919 espectadores (con 38,15 millones de euros acumulados) y supera así a ‘Los otros’ (2001), de Alejandro Amenábar (6.410.561 espectadores y una recaudación de 27.254.163 euros). Una vez pulverizada esta barrera quedan ya muy atrás otros pelotazos mayúsculos como ‘Lo imposible’ (2012), de Juan Antonio Bayona (6.124.698 espectadores y 42.386.171 euros); ‘La muerte tenía un precio’ (1966, y sí, es española con 5.520.971 espectadores); ‘Torrente 2, misión en Marbella’ (2001), con 5.321.969 espectadores; ‘La gran aventura de Mortadelo y Filemón’ (2003), con 4.985.983; ‘El orfanato’ (2007), con 4.420.636, y ‘No desearás al vecino del quinto’ (1970) con 4.371.624 entradas vendidas.
Como ven el abanico es muy grande y alcanza ya desde el cine cómico de posguerra, el espagueti western o las producciones con aire de Hollywood que todavía mantienen el listón altísimo, ya que ‘Los otros’ logró 210 millones de euros en todo el mundo, una barrera que difícilmente superará ‘Ocho apellidos vascos’. Además debería superar a ‘Lo imposible’ (180 millones), ‘Planet 51’ (105 millones), ‘Volver’ (85 millones) y ‘El laberinto del fauno’ (83 millones). En el horizonte nacional a romper la comedia vasca tiene ya enfilado el registro de ‘Titanic’, que consiguió 41,6 millones de euros y 11,2 millones de espectadores, pero no podrá quebrar el récord de ‘Avatar’, que logró 77 millones de euros sólo en España con 12 millones de espectadores.
Entre las razones económicas, apuntan, del éxito de ‘Ocho apellidos vascos’ figura la Fiesta del Cine, un periodo que coincidió con el estreno casi inmediato de la película y que podría haber ayudado a darle empujón: con las entradas rebajadas incluso más del 50% los espectadores acudieron en masa a los cines y alentaron el tsunami de la película gracias a que en esos días casi un millón de personas abarrotó las salas. Pero es que incluso después la película ha seguido su cuesta arriba imparable, lo que evidencia que el guión ha acertado con sus claves y que el efecto llamada del público entre sí ha sido arrollador.
Y en breve, la segunda parte
Porque sí, acaba de empezar el proceso de preproducción para rodar la segunda parte de ‘Ocho apellidos vascos’. Al parecer el equipo formado por Borja Cobeaga y Diego San José ya tenía claro que Telecinco y ellos volverían a unirse porque olieron el potencial éxito de la película después de la descomunal campaña de promoción del filme. Y los buenos resultados han puesto alfombra roja en Mediaset, que no va a desperdiciar la oportunidad de sacar dinero del cine. Todavía está en mantilla la secuela, pero se mantienen ambos guionistas y el director, Martínez Lázaro, que después de vivir una época dorada en los 80 y parte de los 90 como miembro de la mal llamada “comedia madrileña” ha regresado por la puerta grande.