Tres novelas gráficas entre las novedades de la editorial La Cúpula, tan diferentes entres sí que abarcan casi todos los tipos de novela gráfica existentes, de la literatura fantástica al relato social en España.

‘Lovecraft: desde el más allá’ (17 euros)

Monstruosas criaturas primigenias que laten bajo las aguas, abismos siniestros más allá de las estrellas, extraños colores venidos del espacio para contaminar la existencia de los hombres? Y lo innombrable acechando siempre en el umbral. Con su trazo lúgubre y minucioso, Erik Kriek reformula en forma de cómic los mejores relatos de H. P. Lovecraft, genio de la literatura de terror e irrepetible visionario de la amenaza cósmica y silenciosa que desde la noche de los tiempos se cierne sobre la humanidad. Una lectura aterradora y fascinante que alumbrará nuestros rincones oscuros y hará entrega de nuestras almas a las alimañas descarnadas de la noche.

 

‘Patrulla 142’ (20 euros)

Ganadora de un Premio Ignatz, esta novela gráfica igue a un grupo de scouts y a sus monitores a lo largo de una semana en un campamento en los bosques de New Jersey, durante el verano de 1995. Historia sobre adolescentes y adultos, nos muestra la delgada línea que separa la infancia de la edad adulta y las consecuencias de un posicionamiento autoritario. Prescindiendo de visiones idílicas, Dawson describe la comicidad y la brutalidad inherentes a las relaciones entre jóvenes y adultos, la hipocresía de la moral institucional y la resistencia del espíritu humano.

 

‘Entretelas’ (17 euros)

Años ochenta, en algún lugar de la Cataluña obrera. Tras varios años de aprendizaje y entrega, los empleados de una empresa textil se ven en la calle cuando la fábrica es abandonada a su suerte por la patronal.
El panorama no es muy esperanzador: optar al subsidio de desempleo resulta toda una odisea y el acceso a otra ocupación parece misión imposible. Varios trabajadores, entre ellos el charnego Agustín, resuelven embarcarse en la idea de refundar la fábrica como cooperativa, optimizando todos los recursos a su alcance para restablecer una cartera de clientes y, sobre todo, recuperar su dignidad laboral. Rubén del Rincón, testigo infantil de aquellos días emocionantes, relata aquí la épica empresa de aquellos hombres, sus vidas, su entorno y sus anhelos, logrando el retrato de una época que, como ocurre con las mejores crónicas del pasado, no deja de darnos pistas acerca de nuestro presente.