Los preliminares de anoche se unen a la inauguración oficial esta tarde del 60º Festival de San Sebastián, uno de los cinco grandes de Europa y el de más solera de España; para empezar, ‘El fraude’, con Richard Gere y Susan Sarandon.
Richard Gere inició anoche con su llegada al lujoso hotel María Cristina, el desfile de estrellas en la edición más apabullante de los últimos años del festival de cine de San Sebastian 2012. A pesar de la rebaja de presupuesto se ha echado el resto y con mucha imaginación y buenas dosis de riesgo han conseguido que en los próximos días pasen por la capital guipuzcoana Ewan McGregor, Oliver Stone, John Travolta, Tommy Lee Jones y Dustin Hoffman. Muchos para recoger premios, también con película bajo el brazo.
Susan Sarandon, compañera de Gere en la película inaugural, ‘El fraude’, aterrizó en Bilbao y antes de partir hacia San Sebastián pidió visitar el Guggenheim, escala habitual de los agasajados en el festival. La exmujer de Tim Robbins lo hizo en compañía de su hijo y dos de sus hermanas, así como del director Barry Levinson, que presenta el filme de terror ‘The Bay’ en el festival.
La 60 edición del festival rendirá prácticamente un homenaje cada dos días. Al poder de convocatoria de su nuevo responsable, José Luis Rebordinos, se une la suerte de que varias películas, como ‘El Fraude’ y ‘Salvajes’, estén en plena gira de promoción, como en el caso de Oliver Stone y John Travolta. Dustin Hoffman clausurará nueve días de cine con su debut como director a los 75 años, ‘Quartet’. Habrá más desde Francia: Catherine Deneuve e Isabelle Huppert, presentarán junto a Marisa Paredes ‘As Linhas de Torres’, el proyecto original del llorado Raoul Ruiz que acabó su mujer, la realizadora Valeria Sarmiento.
Buen cine español
Un buen ejemplo será el de Pablo Berger con su versión de ‘Blancanieves’, que ya arrasó en el Festival de Toronto, ambientada en la España taurina de los años 20, muda y en blanco y negro. Fernando Trueba logra su título más personal con ‘El artista y la modelo’ -en francés y también en blanco y negro-, la historia de un escultor y su joven modelo en la Francia ocupada de 1943. Adorado por el sector cinéfilo, Javier Rebollo convierte a José Sacristán en un pistolero errante por Argentina en ‘El muerto y ser feliz’.