Las primeras novedades editoriales de Astiberri para este mes ya despuntaron este fin de semana, principalmente ‘Siete vidas’ (Josep Maria Beà), ‘Los sexcéntricos. De la creación al calvario’ (Ramón Boldú) y para mediados de mes ‘El cumpleaños de Kim Jong-il’ (Aurélien Ducoudray-Mélanie Allag).

Tres golpes de talento, con J. M. Beà al frente con una edición en formato de álbum que reúne gran parte de su obra desde que arrancara en los años 80 con sus primeros dibujos. Le sigue Boldú, que también unifica su obra en un volumen recopilatorio con sus múltiples vidas como dibujante desde que en 1976 empezara a crear. Y para el 14 de abril un gran regalo, un tándem letra-dibujo formado por Aurélien Ducoudray y los trazos de Mélanie Allag), sobre un falso documental del régimen norcoreano a través de la mirada de un niño de ocho años bajo el gobierno de Kim Jong-il, y que bebe de los relatos de los pocos exiliados de este país-prisión.

‘Siete vidas’ (48 páginas, 14 euros), del versátil autor catalán Josep Maria Beà, se recupera en formato álbum treinta y cuatro años después de que comenzara a publicarse por entregas en la revista Rambla. Esta serie de historietas con protagonista gatuno (recopiladas en un tomo por Intermagen en 1985) se revela como el más íntimo diario en viñetas del maestro Beà. La versión actual, en un formato más grande, cartoné y con nueva rotulación, así como una ilustración de portada realizada por el propio Josep Maria Beà para la ocasión, es un paso más a la hora de poner de actualidad a un autor referente del cómic que comenzó a publicar profesionalmente sus dibujos e historietas desde muy joven, a finales de los 50.

Josep Maria Beà (Barcelona, 1942) conquistó la fama como autor al filo de los años 80, con la publicación de ‘Historias de taberna galáctica (Trilita Ediciones, 2016), un título clave en el proceso de madurez del cómic español al que siguieron otros como ‘En un lugar de la mente’, ‘La esfera cúbica’, ‘La muralla’ o estas ‘Siete vidas’. Su carrera profesional, sin embargo, había empezado mucho antes, cuando siendo niño ingresó en ‘Selecciones Ilustradas’, la agencia de dibujantes comandada por Josep Toutain que nutría a los mercados europeos de historietas de géneros populares. Formado entre Barcelona y París, y con el oficio más que aprendido, en los años 70 aportó su talento a proyectos de audacia como las revistas Nueva Dimensión o Drácula.

Tuvo  reconocimiento internacional en las páginas de cabeceras míticas estadounidenses como Creepy o Vampirella, donde fue el primer autor español que pudo desarrollar y dibujar sus propios guiones. En épocas de trabajo intenso moduló su voz en diversos seudónimos, hoy recogidos en ‘El hombre de los mil estilos’ (Trilita Ediciones, 2017), y como narrador ha hecho incursiones también en la novela juvenil con media docena de títulos. Como editor aportó a la efervescencia de los 80 la revista Rambla y más tarde constituyó su propio sello editorial, Intermagen, en cuyo seno publicó su única obra teórica, ‘La técnica del cómic’. En reconocimiento a su trayectoria, en 2003 le fue concedido el Gran Premio del Salón Internacional del Cómic de Barcelona.

‘Los sexcéntricos. De la creación al calvario’ rescata las aventuras que ha vivido como dibujante desde sus inicios en 1976 hasta la actualidad, un gran clásico Ramón Baldú, que con este libro simboliza su papel como uno de los nombres propios del cómic español. Un nuevo paso en los cómics autobiográficos de Boldú, en el que se dan cita gran parte de las vicisitudes y aventuras que le han ocurrido por dibujar cómics, desde sus inicios en 1976 con la serie ‘Los sexcéntricos’, hasta la actualidad. El autor de Lérida muestra su relación a lo largo de toda su vida profesional con editores, dibujantes, incluso políticos como Silvio Berlusconi. Un libro de cabecera sin duda para profesionales y lectores fisgones, que intercala en su narrativa planchas de ‘Los sexcéntricos’, las 71 únicas páginas que se han podido recuperar, que le sirven a Boldú de hilo conductor de la obra al mezclar lo que dibujaba en aquella época con lo que le estaba sucediendo en esa realidad de donde sacaba y saca las ideas para sus cómics.

Ramón Boldú (Lleida, 1951) nació en plena comarca de Segarra y desde los cuatro años reside en Barcelona. Se lo trajeron sus padres, huyendo, ellos de los malos espíritus y él del plan Marshall (estaba harto de tanta leche en polvo), como bien él contara en uno de sus primeros trabajos autobiográficos. Poco después, allá por los 70, ya nos tocó la moral durante varios años con la serie ‘Los sexcéntricos’, en la contraportada de la revista Lib, faceta de dibujante que tendría su continuación con ‘Mario Gamma, el griego’ (La Cúpula, 1991).

Ya en los 90 se revela como pionero en España de los cómics autobiográficos con sus obras ‘Bohemio pero abstemio’ (La Cúpula, 1995) y ‘Memorias de un hombre de segunda mano’ (Glénat, 1998), que fueron serializadas en la revista El Víbora y reeditadas en 2009 por Astiberri en un volumen integral. Su muy particular periplo vital trasladado al papel continúa con ‘El arte de criar malvas’ (Astiberri, 2008) y ‘Sexo, amor y pistachos’ (Astiberri, 2010), y tras vérselas con la figura del poeta Miguel Hernández en ‘La voz que no cesa’ (EDT, 2014, con guión de Ramón Pereira), concluye por ahora en ‘La vida es un tango y te piso bailando’ (Astiberri, 2015) y en ‘Los sexcéntricos. De la creación al calvario’, donde con la excusa de recuperar parte de las planchas originales de la serie se permite dar un repaso a conciencia del mundo del cómic de los últimos 40 años.

En ‘El cumpleaños de Kim Jong-il’ Ducoudray y Allag crean una ficción documental en la que la fe de un niño de 8 años hacia su gran líder se irá resquebrajando a medida que va descubriendo la otra cara del régimen. “En la República Popular Democrática de Corea del Norte, hay dos personas más importantes que nuestro padre y nuestra madre, nuestro querido general Kim Il-sung y su hijo Kim Jong-il. Como los queremos mucho, colgamos sus fotos en todas partes… En las calles, las fábricas y las casas. Incluso hemos levantado estatuas gigantescas donde depositamos flores por su cumpleaños. Me llamo Jun Sang, tengo 8 años y soy un joven de la Corea liberada. La vida es importante para mí, la esperanza en un futuro radiante, también. Sin embargo, mi vida, mi esperanza, mi felicidad valen menos que la patria”. Así describe Jun Sang, un niño normal y corriente de Corea del Norte, los pilares que rigen su vida diaria.

Su padre trabaja en la mina y su madre en una fábrica de confección, tejiendo uniformes. En la escuela le han enseñado que sus enemigos son los americanos y los surcoreanos, y que la única persona que los puede proteger de todos los males es Kim Jong-il, también llamado “dirigente mundial del siglo XXI” o “padre bienamado”, el sucesor del difunto Kim Il-sung, que los guiará hacia la realización del milagro socialista. En sus ratos libres ve series que glorifican al líder en el canal único de televisión, y con sus amigos lee tebeos que narran la pésima vida de los surcoreanos. De vez en cuando asisten a una ejecución pública y recogen los casquillos de las balas, que traen suerte. Es un niño feliz, con una fe ciega hacia el régimen.

Pero la hambruna los asola, no queda comida en la ciudad, tampoco en el campo. Cuesta conseguir el cuenco de arroz diario, y a veces toca cazar ratas. A la familia de Jun Sang no le queda más remedio que huir hacia China para intentar llegar a Corea del Sur, pero no será tan fácil escapar del país… El reportero Aurélien Ducoudray se ha documentado e inspirado en los testimonios de los pocos norcoreanos que consiguieron huir de su país y pudieron contar su infancia allí. Junto con Mélanie Allag, firma un intenso relato sobre el paraíso comunista del dictador Kim Jong-il, visto a través de la mirada de un niño que va descubriendo la otra cara del régimen mientras se van resquebrajando todas sus creencias.

Mélanie Allag (Nantes, Francia, 1981) estudió Bellas Artes en Angoulême y, tras graduarse, hizo sus primeros dibujos para la prensa juvenil. Los lápices de colores son sus herramientas favoritas, y en la actualidad divide su tiempo entre el trabajo para prensa y para las editoriales juveniles y de cómic, y dibuja en los talleres de la asociación La Baie noire, en Nantes. Aurélien Ducoudray (Chateauroux, Francia, 1973) es periodista, fotógrafo de prensa y reportero para televisión. Es el autor de numerosos documentales, así como de varios cómics publicados, la mayoría, en la editorial francesa Futuropolis: ‘La faute aux chinois’, ‘Clichés de Bosnie’, ‘Amére Russie’, entre otros.