No por esperado el éxito comercial de ‘Avengers: Endgame’ resulta menos impactante: ha superado los 1.000 millones de dólares de recaudación en todo el mundo con apenas cinco días de proyecciones. La barrera mítica de Hollywood, ese “billón anglosajón” que suele ser el regalo después de meses en pantalla, la última de Marvel lo ha logrado en menos de una semana. Histórico.
Primero fueron las preventas de entradas, días antes del estreno, que ya anticipaban el aluvión. Luego fue el estreno apoteósico (y adelantado) en China, donde también los Vengadores hicieron temblar las plateas de butacas con más de 300 millones de dólares desde el estreno. Y luego el estreno coordinado en América del Norte y Europa, donde literalmente saltaron la banca. Una película de tres horas largas, tan poco habitual para un blockbuster en el que los espectadores consumen litros de refrescos y palomitas (que dan todavía más sed…) que por internet incluso hay tutoriales para elegir en qué momentos ir al baño para no desconectarse de la película, además del tiempo estimado para poder orinar y volver. Hasta la frivolidad, ‘Avengers: Endgame’ le ha roto los esquemas a la industria.
Porque salvo un hundimiento igual de fulgurante, la película con toda probabilidad superará los 2.000 millones y se acercará peligrosamente a las joyas mercantiles de James Cameron, ‘Titanic’ y ‘Avatar’, que siguen en lo más alto. Menos de una semana y si la proyección sigue en pie ya en EEUU mencionan la posibilidad de superar los 3.000 millones, mucho más de lo que le costó a Disney comprar Marvel, su catálogo y todo lo que iba con ella, germen de la actual apoteosis comercial. Con 10 millones de euros ha sido el mejor estreno histórico en España, y lo mismo ha ocurrido en decenas de países, principalmente Europa y Latinoamérica. La escalada es tan fuerte que los beneficios para Marvel son ya parecidos a los de una super empresa tecnológica: la suma de las 22 películas del universo cinematográfico de Marvel (MCU) roza ya los 20.000 millones de dólares. Y lo superará con creces.
Otro dato: sólo en EEUU y Canadá, el cogollo de la industria (que no termina de verse mundial a sí misma y siempre mide por el jardín casero), superaron los 350 millones de dólares en el primer fin de semana, cien millones más que el anterior, que también era de Marvel, ‘Avengers: Infinity War’. Hagan cálculos: al mismo ritmo, aunque siempre decae a partir de la segunda semana, tardará 10 días más en superar los 2.000 millones (superando a la anterior y mencionada Infinity War, pero ojo, en cómputo final). Además ha tiranizado a los distribuidores: en muchos cines han tenido que adelantar las sesiones para poder meter tres seguidas (desde las 18.00 horas hasta la madrugada) por su duración, acumulando salas y poder de convocatoria. Sólo en España ha sido vista por 1,8 millones de espectadores, lo que indica el nivel del rodillo que no ha parado de crecer.