Una filtración del guion del western ‘The Hateful Eight’, la próxima película del director, cancela el proyecto. Seis nombres son los sospechosos.

Quentin Tarantino (Knoxville, 1963), tan amante de los juegos perversos, ha sentado en la sala de interrogatorios a seis hombres sospechosos de cargarse su próxima película, ‘The Hateful Eight’, un western con el que pretendía repetir el éxito de ‘Django desencadenado’ (2012). La filtración on-line del guion ha sepultado el proyecto. Tarantino, decepcionado y molesto, no rodará ‘The Hateful Eight’, al menos a corto y medio plazo.

Mike Simpson, el agente del director de Knoxville, levantó las sospechas. Simpson acumulaba un importante número de llamadas de representantes de actores interesados en el western de Tarantino. Se destapó el secreto. El guion ya circulaba por la red. “Estoy muy, muy deprimido. Acabé el guion, un primer borrador, y no tenía intención de empezar a filmar hasta el invierno que viene, dentro de un año. Se lo di a seis personas y, al parecer, se ha filtrado”, ha denunciado Tarantino en Deadline.

De inmediato, ha ‘sentado’ en la sala de interrogatorios a seis sospechosos, los únicos, en teoría, conocedores del texto. El primero es Reggie Hudlin, uno de los productores de ‘Django desencadenado’. El segundo es un agente que fue a la casa de Hudlin, que le prestó el guion. Para Tarantino, “una traición” con matices. “No fue totalmente terrible porque el agente no terminó el guion”. Tarantino tiene cuatro sospechosos más. “También di el guion a tres actores: Michael Madsen, Bruce Dern y Tim Roth”.

Y la investigación se cierra: “Sé que Tim Roth no lo ha hecho. Uno de los otros dejó que lo leyera su agente y esa persona se lo ha pasado a todo Hollywood”. Tarantino se ha despachado con vehemencia en Deadline. Se siente traicionado y está decepcionado. Y desencadenado: “Se lo di a tres actores de ‘mierda’. Nos reunimos en un lugar y se lo puse en sus manos. El agente de Reggie Hudlin nunca tuvo una copia. Tienen que haber sido o los agentes de Dern o los de Madsen”.

Y, puestos a precisar, Tarantino ha concluido su investigación con un culpable: la agencia CAA, que representa a Bruce Dern, con el que, sin embargo, no ha renunciado a volver a trabajar tras ‘Django desencadenado’. “No sé cómo funcionan estos jodidos representantes, pero no me volverá a pasar. Esta ya no será mi siguiente película”. No obstante, la agencia de Dern se ha desvinculado de inmediato de la filtración del guion de ‘The Hateful Eight’ y ha deslizado una extraña explicación: Tarantino se olvidó de distribuir el texto con marcas de agua que disuadieran una posible copia.

Me gusta que siempre alguien acabe posteando el guion, la gente lo lea y dé su opinión en internet. No querría lo contrario. Me gusta que a la gente le guste mi ‘mierda’ y que haga lo que sea para encontrarla y leerla. ¡Pero es que se lo di a seis putas personas!”, se ha quejado amargamente Quentin Tarantino en declaraciones a Deadline sobre la filtración de su próximo proyecto.

¿Significa eso que ‘The Hateful Eight’ nunca saldrá del cajón de los proyectos? Solo, de momento. “Puedo cambiar de opinión, soy dueño de esta puta cosa. Pero ahora mismo ya te puedo asegurar que no va a ser lo próximo que haga. Es mi bebé y, si la musa me llama más tarde para hacerlo…, lo haremos”, ha subrayado Tarantino, que sí tiene previsto publicar el guion.

Pese a la decepción y la traición, el director ha tirado de orgullo para pasar página: “Me pondré con el siguiente proyecto, tengo otros diez guiones más en el sitio de donde salió este (refiriéndose a ‘The Hateful Eight’)”, el western que ha desencadenado a Quentin Tarantino.