De miniserie puntual a serie normal, al menos en dos partes. Finalmente ‘The Alienist’ (estrenada en el primer formato en TNT y Netflix el pasado mes de abril) tendrá continuación con otro nombre: ‘The Angel of Darkness’, que recuperará al trío protagonista creado por la novela de Caleb Carr.
Por decirlo de una manera transfronteriza entre géneros, a la TV le ha dado por parecerse a la literatura: dos miniseries, cada una centrada en un argumento central literario, de tal manera que ‘The Angel of Darkness’ sería la continuación en un nuevo libro cerrado que bebe del anterior. Tiene también una clara intención comercial: TNT puede presentarla en los próximos Emmy de 2019 como miniserie y así tener más opciones de premio, como le ha sucedido con ‘The Alienist’, que tiene dos nominaciones en las categorías de Mejor Miniserie. Está previsto que el sistema de emisión se repita: en enero (de 2019) en EEUU en TNT, y luego en Netflix en el resto del mundo.
De nuevo aparecerán en pantalla el doctor Lazlo Kreizler (interpretado por Daniel Brühl), su socio e ilustrador John Evans (Luke Evans, al que recordarán de ‘El Hobbit’) y Sara Howard (Dakota Fanning), un personaje rompedor en los tiempos de la narración (en torno a 1897) en los que aspira a ser la primera mujer en la policía de Nueva York, el escenario brumoso y casi victoriano que se confunde con un Londres previo, en una clara referencia interna de la miniserie. La idea de un equipo que ayuda a la policía a capturar a un psicópata asesino de niños de la calle en los primeros tiempos modernos ha resultado muy útil para TNT, que la ha convertido en uno de sus productos de más calidad.
Al igual que la primera entrega, ‘The Angel of Darness’ se basa en otra novela de Carr, que aborda otro caso posterior en el que los personajes han evolucionado: Sara Howard es ahora detective y pide ayuda a Kreizler para encontrar a una niña, Ana Linares, hija de un diplomático español a la que han secuestrado y de la que no hay pistas. No hay que olvidar que la historia se coloca apenas un año antes de la Guerra Hispano-norteamericana entre un decrépito imperio español que pierde Cuba, Puerto Rico y las Filipinas (la puntilla final) y los florecientes Estados Unidos industriales, que ya son para entonces la mayor potencia económica del mundo. La investigación les meterá de lleno en otra secuencia histórica en la que las prácticas forenses empezaban a despuntar y ayudar en la lucha contra el crimen, la psiquiatría avanzaba y la sociedad pasaba del viejo modelo decimonónico al siglo XX.
‘The Alienist’: abrazar la oscuridad victoriana desde Manhattan
La miniserie fue un encargo que migró de los brazos de Cary Fukunaga, uno de los creadores con talento que dieron al mundo la primera temporada de ‘True Detective’, a los de Jakob Verbruggen con el mismo género, el thriller. La serie puede verse en Netflix aún, por cierto. El enfoque era distinto al de otras series que bebían de las fuentes británicas. Aunque en el fondo es similar: Nueva York en 1896, un asesino en serie que mata con un sadismo parecido al de Jack el Destripador y la policía local desesperada por cazarle. Tanto que recurren a un “alienista”, palabra que definía lo que hoy conocemos como psiquiatras.
El personaje principal es el mencionado Laszlo Kreizler, un brillante investigador de la psique humana que trata y cataloga las patologías humanas y dota a esta rama de la medicina de algo más de seriedad frente al típico remedio de meter a los enfermos en sanatorios que parecen prisiones góticas. Toda la serie tiene esa atmósfera gótica donde Nueva York parece una versión más dinámica y acelerada del Londres victoriano. Es muy difícil no abstraerse de esas referencias múltiples que incluso llevan directamente a las versiones más siniestras de los textos de Arthur Conan-Doyle o de Poe. El escenario real además cerraba el círculo: se rodó en Budapest.
Ya entonces están presente Luke Evans (que interpreta a John Moore, reclutado por Kreizler para la investigación) y Dakota Fanning (que da vida a Sara Howard, una ambiciosa secretaria decidida a convertirse en la primera mujer detective en un cuerpo de policía. Hay un personaje clave, por su peso histórico: Theodore Roosevelt, el que fuera luego presidente de EEUU y que por aquel entonces era el jefe de policía de Nueva York, que da vía libre a Kreizler y que aquí interpreta Brian Geraghty. También figuran en el reparto Douglas Smith, Matthew Shear, Robert Ray Wisdom, Matt Linzt y Q’orianka Kilcher.