Dos clásicos de Tobias Wolff de 1989 y 2009 que llegan para aliviar la cuarentena, un buen par de ejemplos de este heredero del estilo de Hemingway y F. Scott Fitzgerald por su atención al detalle, el estilismo y su propia versión del realismo “sucio”.

Una autobiografía novelada y un novelón americano, dos grandes regalos de Alfaguara para aliviar el confinamiento, que se podrán adquirir desde abril en formato digital. ‘Vida de este chico’: hagan memoria audiovisual, de cuando Robert de Niro aún no había entregado su alma a las comedias mundanas y taquilleras, y Leonardo DiCaprio aún no era un hombre maduro crónicamente intenso en cada movimiento. Exacto, ésa película de 1993 que narraba los primeros años de un autor experto en el relato breve y un clásico vivo de la literatura norteamericana.

Tobias Wolff narra sus recuerdos de niño y adolescente, cuando, divorciados sus padres, recorría con su madre con la que formaba una auténtica «pareja telepática» las carreteras de Estados Unidos de un lado a otro del país. Toby o Jack, como le gusta llamarse a sí mismo en homenaje a su adorado Jack London absorberá entre mapas, whisky, peleas a puñetazos, amistades y traiciones, la esencia de esa América de los años cincuenta que marcará irremediablemente su juventud. Una juventud con toques minimalistas y dickensianos a un tiempo y que sirve aquí a su autor para trazar con humor y ternura el retrato de un tiempo pasado en el espejo de su propia imagen.

‘Aquí empieza nuestra historia’ (publicada originalmente en 2009) se centra en un grupo de niños que encuentran en las mentiras una forma de restituir un sentido al mundo que les rodea, hermanos que no se entienden, parejas que rompen durante un viaje por el desierto, una mujer que espía a sus vecinos, unos amigos que se embarcan en una jornada de caza que sólo puede salir mal o un soldado al que le anuncian que su madre ha muerto: todos los personajes de estos relatos se enfrentan a circunstancias cotidianas que sin embargo resultan extraordinarias. En lo más alto de su carrera literaria, Wolff demuestra el milagroso poder de un gran cuento para provocar, sorprender y transformar a los lectores.