Todo va mucho más despacio de lo que se imaginaba: U2 cocina a fuego lentísimo el nuevo álbum, el primero desde 2009.

Fue entonces cuando publicaron ‘No line on the horizon’, a la que siguió la correspondiente gira y marketing que ha convertido a U2 en una nueva versión de los Rolling Stones: más cerca de la edad de jubilación pero siguen en activo con giras millonarias que les enriquecen muy por encima de lo que creían. Música industrializada que exige que cada determinado tiempo salga un nuevo disco para arrullar a fans y medios de comunicación. La respuesta que es el nuevo, que ya tuvo visos de aparecer en 2013, se retrasó a este año y ahora, una vez más, ya no lo verá antes de 2015.

Las razones es que la cocina manda y el disco sigue en pleno proceso de preparación, con sesiones de grabación con los productores Paul Epworth y Ryan Tedder. La revista Billboard es la que ha avisado de que el trabajo va más despacio y que los fans tendrán que tener más paciencia de la habitual. No hay que fiarse de las declaraciones que desde hace meses filtran tanto Bono como The Edge o Mullin, que ya dijeron en su día que preparaban nuevo álbum. Llegaron a decir incluso que ya lo tenían todo hecho. Pero una y otra vez el tiempo les ha contradicho. El propio Bono avisó que “con U2, un disco no está terminado hasta que está en las tiendas”, según dijo a la BBC cuando los periodistas le preguntaban una y otra vez por el nuevo disco.

Sea como fuere, la máquina de hacer dinero ya se puso en marcha pero no rematan el disco. Las bromas en los foros sobre si al envejecer se han vuelto más lentos proliferan y filtrar posibles fechas sólo causa ansiedad. Lo cierto es que con el álbum irá pareja, inevitablemente, otra gira mundial, razón quizás de fondo de que el nuevo trabajo se haya demorado: hay que cerrar toda la organización antes de dar un paso, porque en el negocio está todo medido. La promotora Live Nation parece estar ultimando los detalles para el verano del año que viene. Entre tanto sólo queda ‘Ordinary love’, nominada al Oscar dentro de la banda sonora de la película sobre Nelson Mandela.