Después de que Mortadelo y Filemón pudieran hacerlo, y Zipi y Zape también, faltaba meter en el saco del cine el gran superhéroe ibérico con acento barcelonés, Superlópez. Hoy el cine español estrena uno de los proyectos más longevos, tanto como que empezó en 1997 y ha terminado por fin 20 años después.