Pocos aniversarios centenarios pueden ser tan útiles para nuestro tiempo como el de Emilia Pardo-Bazán, tan contradictoria como su tiempo, tan poliédrica como una mujer moderna y con un talento literario que la colocó a la misma altura que los gigantes de su tiempo. Viajera, gallega, madrileña y parisina, aristócrata y feminista. Un genio creativo inmenso con un solo defecto para su época: era mujer.