Semana más comedida a la espera de que desembarquen los hobbits y Peter Jackson para la próxima, con buen cine social español (‘Los Fenómenos’) y el biopic sobre James Brown.
Quizás recuerden aquella película tan demoledora como emotiva que fue ‘Criadas y Señoras’. Seguro que sí: ese plano sostenido sobre Viola Davis explicando cómo había perdido a su hijo y que resumía a la perfección la terrible bota social que había sobre los afroamericanos en EEUU incluso en tiempos recientes. Tate Taylor firmó una auténtico peliculón que ahora tiene cierta extensión en otro pilar de la cultura negra de EEUU, sostén de su música y parte de su arte y literatura. Uno de los afroamericanos que rompió para siempre estereotipos y, a su manera errática, logró hacer camino fue James Brown, del que Taylor firma este biopic sin demasiadas cortapisas. Y que es, además, la película que elegimos para presentar el puñado de estrenos de calidad de esta semana.
James Brown fue mucho más que un cometa, fue como el meteorito que acabó con los dinosaurios pero en un contexto muy diferente: era negro, bajito, hiperactivo, con graves problemas sociales y un pasado turbulento reconvertido en histrión, showman y revolucionario de la música negra. Le dio ese aire rompedor. Fue el Elvis negro, pero mucho más que Elvis: de su música surgieron muchos otros movimientos musicales, fue mil veces imitado y sus hijos culturales fueron legión durante décadas. Desde el soul terminó por desarrollar el funk, y rompió todos los tabúes y prohibiciones. Fue un negro pobre en una América blanca y racista, y terminó siendo un negro rico en una América igual de blanca pero que tuvo que asimilar que James Brown tenía más dinero e influencia que la mayor parte de ellos.
Resumir esa vida virulenta que incluyó subidas y bajadas de éxito, matrimonios rotos, amantes, sexo, drogas, violencia de género y más de una foto de identificación en varias comisarías, había que tener experiencia y un buen ojo clínico sobre un personaje que todavía hoy despierta muchas dudas, no sobre su talento musical, eternamente glorificado, sino por su personalidad hipertensa. Tate Taylor, que dirige a Chadwick Boseman como James Brown, ha elegido el arranque de la figura histórica, su evolución hacia la madurez atrofiada, y todo con guiños a la infancia del cantante, muy dura, que y explica el poder de su música, su vida y los variables estados de ánimo. Y un detalle: ¿saben quién es uno de los productores del filme? Mick Jagger, que conoció a Brown, y le sufrió, en uno de esos conciertos primerizos en EEUU, cuando tuvieron que tocar después de que el gran rey negro hiciera uno de sus espectaculares shows. “Ahí queda eso”, les vino a decir.
Película: I Feel Good. Título original: Get on Up. Dirección: Tate Taylor. País: USA. Año: 2014. Género: Biopic, drama, musical. Interpretación: Chadwick Boseman (James Brown), Viola Davis (Susie Brown), Dan Aykroyd, Octavia Spencer, Nelsan Ellis, Lennie James, Nick Eversman (Mick Jagger). Guion: Steve Baigelman, Jez Butterworth y John Butterworth. Producción: Brian Grazer, Erica Huggins, Mick Jagger, Victoria Pearman y Tate Taylor. Fotografía: Stephen Goldblatt. Diseño de producción: Mark Ricker. Distribuidora: Universal Pictures International Spain.
El cine español, de fiesta por los resultados en taquilla de este año, presenta una nueva pieza de cine social crítico, ‘Los Fenómenos’, producción de ZircoZine y Maruxiña Film Company dirigida por el gallego Alfonso Zarauza, y que se une al último cine crítico que se ha hecho en España, como ‘Cinco Metros Cuadrados’ (Max Lemcke, 2011), ‘Somos Gente Honrada’ (Alejandro Marzoa, 2013), ‘Ayer no Termina Nunca’ (Isabel Coixet, 2013), ‘Hermosa Juventud’ (Jaime Rosales, 2014) y ‘Justi&Cia’ (Ignario Estaregui), estrenada hace apenas un mes.
Si usted piensa en las causas de la crisis y posterior depresión económica y, en concreto, en España, citará irremediablemente a la burbuja inmobiliaria. Las consecuencias del funesto boom inmobiliario las seguimos pagando todos, prácticamente todos. Lo que ha pasado y pasa en España con la burbuja inmobiliaria es digno de estudio y, por supuesto, de una mirada y cuantas sean necesarias en el cine. Alfonso Zarauza, director del filme ‘La Noche que Dejó de Llover’ (2007) y las producciones televisivas ‘Encallados’ (2013) y ‘El Viaje de los Chévere’ (2014), se atreve en ‘Los Fenómenos’ con uno de los grandes tumores de la crisis española. “¿Qué nos pasó como ciudadanos para que nos engañaran de esa manera?”, se pregunta Zarauza que cuenta con un reparto con gran presencia gallega encabezado por la barcelonesa Lola Dueñas, gran protagonista del filme, que aparece casi en cada escena, y el lucense Luis Tosar. Tuvo para contar su historia 1.400.000 euros de presupuesto y el estreno del filme en la Sección Oficial del último Festival de Málaga de Cine Español.
Alfonso Zarauza explora la crisis de la construcción desde un original punto de vista, una mujer (Lola Dueñas) en una cuadrilla de obreros, en un mundo eminentemente masculino. Neneta (Lola Dueñas) vive en la costa de Almería en una furgoneta con su pareja, Lobo (Luis Tosar). El mismo día en el que Lobo, supuestamente, empezaba un nuevo trabajo, la abandona. Neneta recoge el campamento y vuelve con su bebé a su pueblo natal en Galicia. Al regresar a su industrial y decadente pueblo todo son dificultades y solo es capaz de conseguir un puesto de peón en la construcción. Sufre la dureza del trabajo y el hecho de ser mujer en un oficio de hombres, pero consigue sobreponerse con coraje y en compañía de su cuadrilla empiezan a ser conocidos por el constructor como ‘Los Fenómenos’ por su capacidad para levantar metros cuadrados. En pleno boom del ladrillo logra ganar mucho dinero en la construcción y comienza a albergar nuevos sueños que, poco a poco, se verán truncados con el comienzo de la crisis.
FICHA TÉCNICA DE ‘LOS FENÓMENOS’:
Dirección: Alfonso Zarauza. País: España. Año: 2014. Duración: 99 minutos. Género: Drama. Reparto: Lola Dueñas (Neneta), Luis Tosar (Lobo), Juan Carlos Vellido (Furón), Ledicia Sola (Nina), Miguel de Lira (Balboa), Antonio Durán ‘Morris’ (Benítez), Xosé Antonio Touriñán (Curtis), Xulio Abonjo (Josué), Alfonso Agra (Barreiro) y Gonzalo Uriarte (Avelino). Guion: Alfonso Zarauza y Jaione Camborda. Producción ejecutiva: Farruco Castromán y Rubén Zarauza. Director de producción: Pablo Atienza. Fotografía: Alberto Díaz Bertixti. Música: Piti Sanz y Anxo Graña. Montaje: Juan Carlos Arroyo. Dirección de arte: Curru Garabal. Vestuario: Alicia y Lola Dapena ‘Saturnas’. Distribuidora: Surtsey Films.
‘Miss Julie’, o ‘La señorita Julia’, es la nueva adaptación al cine de la obra de August Strindberg del mismo título, guionizada y dirigida por Liv Ullmann con Jessica Chastain, Samantha Morton y Colin Farrell como reparto de lujo para una pieza teatral europea de gran calidad. Estuvo presente en el último Festival de Toronto con buenas críticas y es una zambullida en el cine de calidad por una de las mujeres que más se ha movido dentro del cine europeo, Ullman, actriz y amiga nada menos que de Bergman y del que heredó el gusto por la realización.
‘Miss Julie’ arranca una noche de verano en una mansión del campo irlandés en 1880. La película explora la lucha de poder entre una joven aristócrata y el criado de su padre. En un ambiente festivo donde han desaparecido las barreras sociales, Julia y John bailan y beben, se seducen y manipulan. Ella, llena de altivez, desea rebajarse; él es educado, pero basto. A los dos les une un deseo y una repulsión mutua. Seductores y tiernos, o brutales y salvajes, sus momentos íntimos les empujan a hacer planes desesperados y a soñar con una vida juntos. Sin saber si la mañana traerá esperanza o desesperanza.
Película: La señorita Julia. Título original: Miss Julie. Dirección: Liv Ullmann. Países: Noruega y Reino Unido. Año: 2014. Género: Drama, romance. Interpretación: Jessica Chastain, Colin Farrell, Samantha Morton. Guion: Liv Ullmann; basado en la obra de August Strindberg. Producción: Oliver Dungey, Teun Hilte, Synnøve Hørsdal. Fotografía: Mikhail Krichman. Montaje: Michal Leszczylowski. Diseño de producción: Caroline Amies. Vestuario: Consolata Boyle. Distribuidora: Golem.
‘Hombres, Mujeres & Niños’ es la nueva zambullida en el cine no palomitero de Jason Reitman, hijo de uno de los padres de ese mismo cine de refresco y palomitas, Ivan Reitman, padre también de los Cazafantasmas, por poner un ejemplo. El filme, que cuenta en el reparto con pesos pesados del star-system como Adam Sandler o Emma Thompson, narra la historia de un grupo de adolescentes de instituto y de sus padres intentando comprender las muchas maneras en que Internet ha cambiado sus relaciones, su comunicación, la imagen que tienen de sí mismos y sus vidas amorosas.
La película intenta analizar temas sociales como la cultura de los videojuegos, la anorexia, la infidelidad, la búsqueda desesperada de la fama y la proliferación de materiales ilícitos en Internet. A medida que cada personaje y sus relaciones son puestos a prueba, se nos muestra los diversos caminos que elige la gente (algunos trágicos, otros esperanzadores), mientras se hace evidente que nadie es inmune al enorme cambio social que nos ha llegado a través de nuestros teléfonos, nuestras tabletas y nuestros ordenadores.
Película: Hombres, mujeres y niños. Título original: Men, women & children. Dirección: Jason Reitman. País: USA. Año: 2014. Duración: 116 min. Género: Comedia dramática. Interpretación: Adam Sandler, Jennifer Garner, Rosemarie DeWitt, Emma Thompson, Ansel Elgort, Judy Greer, Kaitlyn Dever, Dennis Haysbert, J.K. Simmons. Guion: Jason Reitman y Erin Cressida Wilson; basada en la novela de Chad Kultgen. Producción: Jason Reitman y Helen Estabrook. Música: Bibio. Fotografía: Eric Steelberg. Montaje: Dana E. Glauberman. Diseño de producción: Bruce Curtis. Vestuario: Leah Katznelson. Distribuidora: Paramount Pictures Spain.
‘St Vincent’ es el enésimo regreso al cine independiente de Bill Murray, uno de los mayores bichos raros de cine americano, monologuista, comediante, actor de drama y cara de algunas de las películas más legendarias de los últimos 40 años, como ‘Los Cazafantasmas’, ‘Atrapado en el tiempo’ o ‘Lost in translation’. Una película indie sobre un personaje indie que devuelve al público al mejor Murray, que alterna pelotazos de George Clooney con ese otro tipo de séptimo arte que en EEUU tiene una gran calidad y que, como es el caso, suele saltar hacia arriba gracias a la presencia en pantalla de gente como él, o de Naomi Watts o Melissa McCarthy. Eso sí, repite también por enésima vez un guión que empieza a ser cliché: viejo cascarrabias alternativo y egoísta que se hace amigo de un niño con ganas de aprender.
Maggie es una madre separada que se muda a Brooklyn con su hijo de doce años, Oliver. Al tener que trabajar muchas horas, no le queda más opción que dejar a Oliver al cargo de su nuevo vecino, Vincent, un jubilado cascarrabias aficionado al alcohol y a las apuestas. Pronto, una peculiar amistad florece entre esta improbable pareja. Junto a una stripper embarazada llamada Daka, Vincent conduce a Oliver por todas las paradas que conforman su rutina diaria: las carreras de caballos, el club de striptease y su bar habitual. Pero mientras Vincent cree que ayuda a Oliver a hacerse un hombre, Oliver comienza a ver en Vincent algo que nadie más ve: Un hombre incomprendido de buen corazón.
Película: St. Vincent. Dirección y guion: Theodore Melfi. País: USA. Año: 2014. Duración: 102 min. Género: Comedia. Interpretación: Bill Murray (Vincent), Melissa McCarthy (Maggie), Naomi Watts (Daka), Chris O’Dowd (Geraghty), Terrence Howard (Zucko), Jaeden Lieberher (Oliver). Producción: Peter Chernin, Theodore Melfi, Fred Ross y Jenno Topping. Música: Theodore Shapiro. Fotografía: John Lindley. Montaje: Sarah Flack y Peter Teschner. Diseño de producción: Inbal Weinberg. Vestuario: Kasia Walicka-Maimone. Distribuidora: eOne Films Spain.
Y como contrapunto a todo, una película que ha levantado ampollas entre los sectores religiosos alemanes, centrado en el fundamentalismo cristiano, oculto entre asociaciones civiles y el auge del yihadismo islámico. La película ganó el Premio al Mejor Guión en el Festival de Berlín de este año y la Espiga de Plata & Premio FIPRESCI en la última Seminci de Valladolid. Algo debe tener ‘Camino de la Cruz’ para tanto premio y tanta fusta con olor a incienso de sacristía. Uno de los principales motivos por los que quiso abordar este tema fue su experiencia personal tras haber estado internado junto a sus hermanas en un internado católico “muy estricto”. Con esta cinta el director pone el foco en otro fundamentalismo que se observa, “por ejemplo”, si uno “cruza Estados Unidos en coche”, pone la radio y oye a los “fundamentalistas cristianos”, pero también se percibe en muchos “ateos” con “planteamientos bastante radicales”.
Todo gira alrededor de Marie, la hermana mayor que se prepara en catequesis para tomar la confirmación. Adoctrinada y alertada sobre la música, las revistas o los chicos, la joven es dominada por un permanente sentimiento de culpa que le hace, entre otras muchas cosas, querer entregar su vida a Dios a cambio de la curación de su hermano pequeño, Johannes, quien a sus cuatro años aún no ha comenzado a hablar. Aunque guarda esta decisión en secreto, su actitud es alentada por su madre represora, que siempre está echándole en cara las muchas cosas que hace mal, así como el sacerdote, que busca convertir a los jóvenes en guardianes de Dios.
Película: Kreuzweg (Camino de la Cruz). Dirección y guion: Dietrich y Anna Brüggemann. País: Alemania. Año: 2014. Duración: 107 min. Género: drama. Interpretación: Lea van Acken, Franziska Weisz, Florian Stetter, Ramin Yazdani, Hanns Zischler, Birge Schade, Anna Brüggemann, Michael Kamp, Sven Taddicken. Producción: Ufa Cinema.