Titán es uno de esos mundos que copan las listas de potenciales para albergar vida junto con los “mundos de agua” (Encélado, Ceres, Europa…), satélites de gigantes que por sus particulares condiciones son prometedores destinos incluso para la colonización humana futura. La NASA ya tiene preparada su misión no tripulada, Dragonfly, basada en un dron helicóptero, para 2026.