Se acabó. Rosetta, después de más de una década de misión de vuelo y orbital y otro año y medio de intensa vigilancia y análisis del cometa 67/P, ha “terminado su guardia” impactando contra el cometa.
Se acabó. Rosetta, después de más de una década de misión de vuelo y orbital y otro año y medio de intensa vigilancia y análisis del cometa 67/P, ha “terminado su guardia” impactando contra el cometa.
Nueva entrega de los Todo Astronomía, mirando de nuevo hacia el origen de la vida gracias a que la sonda Philae ha descubierto lo que mucho esperaban: material orgánico básico para la formación de vida en un cometa. Pero no es lo único que las sondas espaciales han encontrado: arcos rojos regulares en Tetis. Y Canarias vence a México para poder albergar parte de la red de telescopios Cherenkov.
Tal y como había calculado la Agencia Espacial Europea (ESA), el módulo Philae ha dado señales de vida a la Tierra una vez que el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko se ha acercado al Sol lo suficiente como para que se recarguen las baterías parcialmente.
Seguro que la recuerdan, esa pequeña sonda Philae que marcó otro hito, el de hacer aterrizar a una máquina a 500 millones de km de la Tierra sobre un cometa en movimiento. Ahora empiezan a aparecer nuevos datos que justifican la proeza.
Otra vez Philae, post-hibernación: hielo endurecido en el corazón del cometa y moléculas de carbono que darían otro apoyo al origen externo de la vida.
Fin, por ahora, de la historia de amor entre la sonda Philae y el cometa 67P, apenas 57 horas de idilio, de hazaña tecnológica y de futuro si se tiene paciencia.
Hoy es un gran día para la ciencia, la tecnología y por supuesta para la Humanidad, que se ha demostrado a sí misma que no hay horizonte que se le resista (por ahora).