Seguro que recuerdan alguna película de ciencia-ficción, serie o novela, en la que aparecía esa palabra, que no significa más que una cosa: convertir un planeta muerto en otro vivo parecido a la Tierra. Pues bien, sobre el papel ya es factible.
Seguro que recuerdan alguna película de ciencia-ficción, serie o novela, en la que aparecía esa palabra, que no significa más que una cosa: convertir un planeta muerto en otro vivo parecido a la Tierra. Pues bien, sobre el papel ya es factible.
Seguro que la recuerdan, esa pequeña sonda Philae que marcó otro hito, el de hacer aterrizar a una máquina a 500 millones de km de la Tierra sobre un cometa en movimiento. Ahora empiezan a aparecer nuevos datos que justifican la proeza.
El primer aviso de que está ahí fue el pasado 13 de enero, una gigantesca erupción solar de nuestra estrella vital, que será monitorizada por la Inteligencia Artificial y no perderla de vista nunca.
Otra “pica en Flandes”, mejor dicho, en Plutón: la misión New Horizon de la NASA empezará a analizar Plutón el próximo 15 de enero después de casi una década de viaje.
Venus, hermosa por fuera, la estrella de la tarde, pero infernal por dentro: sin embargo pudo albergar también océanos… pero de CO2.
Hacía tiempo que no hablábamos de Marte, pero el planeta rojo es un imán para la Humanidad, y para la posible existencia de vida, que deja un rastro de metano que la Curiosity ha detectado.
La basura espacial se amontona como los recuerdos absurdos en un trastero, pero con la diferencia de que los recuerdos no agujerean satélites y caen a la atmósfera.
Otra vez Philae, post-hibernación: hielo endurecido en el corazón del cometa y moléculas de carbono que darían otro apoyo al origen externo de la vida.
Fin, por ahora, de la historia de amor entre la sonda Philae y el cometa 67P, apenas 57 horas de idilio, de hazaña tecnológica y de futuro si se tiene paciencia.
Hoy es un gran día para la ciencia, la tecnología y por supuesta para la Humanidad, que se ha demostrado a sí misma que no hay horizonte que se le resista (por ahora).